Zamora CF y Unionistas disputaban el primer derbi entre ambos en liga en Segunda División B. El partido apuntaba atractivo y no decepcionó. Los locales apostaron por 4-2-3-1 con cuatro jugadores muy móviles y verticales en vanguardia. Dani Hernández, Perero, Escudero y Sergio García generaban mucho peligro por dentro a la defensa de Unionistas. Una defensa que Hernán Pérez trató de poblar un poco más de lo habitual, con cinco jugadores en retaguardia colocando un 5-3-2.
El primer aviso lo dio Unionistas. Marín se incorporaba de carrilero por banda derecha y su centro al corazón del área lo repelió Jon Villanueva cuando Carlos de la Nava estaba listo para empujar a gol. Pese a esa acción tempranera, los primeros minutos fueron para la escuadra local, que gobernaba el centro del campo y trataba de hacer un juego más elaborado. Sergio García y Dani Hernández pusieron a prueba a un Serna que comenzó nervioso bajo los palos, pero que poco a poco fue ganando empaque.
La contienda se equilibraba. Unionistas apostaba por un juego más directo, buscando balones a Carlos de la Nava y Aythami, para que ambos descargasen el esférico a los costados y empezar desde ahí la acción de ataque. Y era a través de los centros laterales como Unionistas generaba más peligro. Nespral, con un disparo fuera tras un pase de la muerte, y Aythami, que remató fuera un centro desde el costado de Mario Gómez, generaron dudas en la defensa zamorana.
El choque transitaba hacia el descanso y los aficionados, tanto locales como de Unionistas, se divertían en un duelo con alternativas, que por momentos se rompía en dos al atacar los dos planteles sin complejos. El duelo llegaba al tiempo de asueto sin goles y con la sensación de que ambos equipos estaban cómodos con el escenario, cada uno jugando a lo que le interesaba en ataque, aunque sin mostrarse efectivos en el último pase y sobre todo en la definición, especialmente el Zamora.
El paso por vestuarios sentó mucho mejor a Unionistas. A los 40 segundos, un error defensivo del Zamora lo aprovechaba Viana para hacer el primero. Centro lateral, mala salida de Villanueva y remate de Viana a portería vacía, aprovechando un esférico huérfano en el corazón del área pequeña. Ese gol enterró las opciones del Zamora CF, que prácticamente desapareció en la segunda mitad, sin pólvora arriba e incapaz de hacer daño a la defensa de Hernán Pérez.
Cuando parecía que los rojiblancos se recuperaban del golpe, Viana hacía el segundo. Fue una diana estratosférica. La falta, prácticamente junto al córner, se colaba por la escuadra del palo largo con una parábola imposible que el arquero zamorano fue incapaz de leer pese a sus dos metros de altura. Restaba algo menos de media hora y Unionistas tiró de jerarquía para manejar el tiempo del duelo, cerrar espacios al Zamora y encontrar huecos ante un rival abierto para rematar el resultado.
Los cambios en el equipo rojiblanco no terminaron de aportar lo deseado y tan solo una acción de Jacobo Alcalde inquietó la portería de Serna. Al final, un 0-2 que permite a Unionistas ganar en el Ruta de la Plata, algo que no había hecho ningún equipo en liga desde hacía casi dos años, y seguir en los puestos de privilegio de la tabla. Mientras, el Zamora, se sitúa en la posición intermedia, con 8 puntos, y a la espera de recibir el próximo domingo al Salamanca CF UDS otra vez en el Ruta de la Plata.