El Grupo VIII de la Tercera División se detiene y no regresa hasta el primer fin de semana del mes de enero. Un fin de semana de respiro que se toma la competición en fechas navideñas, que los entrenadores también aprovechan para dar descanso a sus jugadores. En el caso de los dos equipos zamoranos, sus dos técnicos utilizarán la misma metodología. Una semana entera de vacaciones para volver al trabajo el próximo lunes 28. No se trata de un tiempo especialmente prolongado, pero permitirá a los jugadores vivir con sus familias los días centrales de Nochebuena y Navidad.
Las dos escuadras llegan a este descanso por encima de las expectativas creadas. En el caso del Zamora, las previsiones le daban como sólido líder del Grupo VIII de la Tercera División, pero pensar que podría tener siete puntos de ventaja sobre el segundo después de dieciocho encuentros parecía un pronóstico especialmente optimista. Pero tras un inicio titubeante e irregular, los rojiblancos se aplicaron y han sido capaces de estar catorce semanas sin perder, doce de ellas con victoria. Una racha que les llevó de la zona media al liderato y a conseguir una máxima ventaja sobre el segundo de nueve puntos. Tras el empate en Palencia, esa ventaja se ve reducida a siete con el Deportivo Palencia y a ocho con la Gimnástica Segoviana; sin duda, los dos principales rivales del Zamora desde el inicio de temporada.
La cuarta posición de la tabla, y por tanto la última plaza que permite jugar fase de ascenso a Segunda División B, está ahora en poder del GCE Villaralbo. En el triple empate con Numancia B y La Bañeza, el mejor balance de goles pone a los eléctricos en esa posición de privilegio. Una plaza tremendamente positiva; porque si bien es cierto que el equipo de Diego Rojas partía con muchas opciones de convertirse en uno de los equipos revelación por la plantilla que había confeccionado, también lo es que esa teoría debía llevarse a la práctica. Una buena marcha que se ha sustentado en el enorme trabajo defensivo que ha permitido que los de Rojas se marchen al parón navideño como el equipo menos goleado del grupo con once dianas encajadas en dieciocho partidos.
En definitiva, descanso merecido para el equipo más goleador del grupo y para el menos goleado, ambos de la provincia de Zamora, y ambos metidos en posiciones de fase de ascenso.