Pese a que el once de Manuel Álvarez era de circunstancias, sobre todo con una línea defensiva totalmente nueva con jugadores poco habituales en esas posiciones, el Zamora B salió al partido un poco más enchufado, con mucha intensidad y gozando de alguna ocasión que pudo abrir el encuentro. Pese a todo, y aun siendo un encuentro con mucha tensión, las ocasiones fueron escasas por parte de ambos. La más clara corrió a cargo del Zamora en la primera parte, pero un tiro de Iñaki, cuando vio al meta visitante adelantado, no llegó a su destino.
Con ese empate a cero comenzaba la segunda parte. El Zamora B seguía siendo un conjunto muy férreo en defensa no dejando ni una sola ocasión al equipo salmantino. Eso sí, en la parcela ofensiva tampoco acababa de coger el ritmo y no era capaz de llegar con verdadero peligro a la meta del Carbajosa. Los minutos pasaban y el empate a cero parecía inamovible.
Pero en el minuto 75, en un saque de banda del Carbajosa sin aparente peligró, un fallo en la marca provocaba que el ariete charro se encontrase con la pelota en el corazón del área y solo tuviese que empujar a gol. Esa diana desencajaba a un Zamora que hasta ese momento era merecedor de por lo menos un punto. Con ese 0-1, Manu Álvarez arriesgó con tres defensas y el Carbajosa lo aprovechó para hacer el segundo a falta de cinco minutos para el final.
Al final, derrota por 0-2 que sigue dejando al filial rojiblanco en un escenario de necesidad tremendo en el que tendrá que pelear hasta el último día para conseguir la salvación.