El CD Zamarat estrenaba este curso en casa ante el CB Adareva Tenerife, un rival, a priori, inferior a las prestaciones que el CD Zamarat podría ofrecer. El Ángel Nieto dictaría sentencia sobre esas premisas, y vaya si lo hizo. Las de Vasconcelos, tras un inicio dubitativo, quizá por los nervios propios de un debut, y algo espeso, no tardaron en ponerse por delante con una ventaja que no paró de crecer.
El resultado al final del primer cuarto ya dejaba entrever lo que iba a ser el encuentro, con un 15-10 a favor de las naranjas. Comandadas por Sarah Polleros, las de Vasconcelos llevaron hasta 33 su marcador en el segundo cuarto, dejando el resultado al descanso 33-18. Las de Jaime Sañudo no lograban frenar el empuje de las locales, que estaban haciendo sangre de cada brecha en la defensa rival.
A partir de la segunda mitad llegaría la clave para la aplastante victoria de las naranjas, que sería un gran acierto en el tiro desde la línea de tres. Ello quedaría reflejado en el parcial de este tercer cuarto, que se fue hasta el 20-8 para las locales, dejando el marcador en un contundente 53-26. Conforme avanzaba el encuentro, las de Vasconcelos no levantaban el pie del acelerador y las visitantes comenzaban a bajar los brazos, viendo que la diferencia era prácticamente insalvable, incluso con más de la mitad del último cuarto todavía por jugarse.
Finalmente, el marcador se sellaría en un 90-42 a favor del CD Zamarat. Un total de 48 puntos de diferencia que, no obstante, no puede permitir a las naranjas relajarse, pues la competición acaba de empezar. Lo que sí está claro es que este es el camino a seguir.