Cuatro victorias en cinco encuentros. El Zamora B sigue firmando un gran inicio de campeonato y solo el tropiezo ante el Peñaranda evita que el equipo de Alberto de León tenga un pleno en el casillero que por sensaciones tampoco hubiera extrañado a nadie. Este sábado, el filial rojiblanco sumaba tres nuevos puntos gracias a la victoria solvente ante el Betis de Valladolid. A los zamoranos les valió con mostrar su mejor cara en la primera mitad y mantener la ventaja en el segundo acto.
Así, en el minuto 16 Chemi avanzaba a los suyos, y pasada la media hora de juego Ioritz anotaba la segunda diana. Era un 2-0 justo, ya que pese a no gozar de un número ingente de ocasiones, la realidad es que el Zamora B estaba siendo superior a su oponente sobre el terreno de juego. Una superioridad que se mostraba a través de una mayor posesión, un punto más de intensidad y una verticalidad arriba que puso en aprietos a los pucelanos.
Con ese 2-0 se llegaba al inicio de la segunda mitad. Los locales sabían que el partido estaba encarrilado y se limitaron a mantener el orden, la compostura y a buscar balones a los espacios para generar alguna ocasión más de peligro. Ioritz tuvo en sus botas el tercero, pero el arquero adivinó la vaselina.
Los minutos pasaban y los rojiblancos no tenían sensación de que la renta pudiera peligrar. A partir de ahí, en los últimos minutos, la contienda se endureció, las faltas se multiplicaron y apenas se jugó. Así se llegaba al final de un duelo que terminaba con ese 2-0 que sigue dejando al Zamora B en la parte alta de la tabla a un solo punto del liderato.
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