El F.S. Zamora logró 3 puntos sufriendo hasta la extenuación en Venta de Baños frente al Sani 2000. Y eso que apenas transcurrido un minuto de juego, Nacor puso por delante a los zamoranos aprovechando una asistencia del guardameta Javi Santos. El Sani 2000 empató en la jugada siguiente por mediación de Miguel Ángel, que finalizó una jugada de estrategia e introdujo el balón en la portería de Santos con suspense.
Tras recibir el empate, los pupilos de Alberto Grande se plantaron en la pista y se adaptaron a las condiciones del duelo a la perfección. El paso de los minutos sirvió para que los visitantes terminasen de imponer su autoridad en el partido. Fruto del empuje llegó el 1-2 por mediación de Samu Martínez, que hizo buena la asistencia de su hermano Héctor cuando restaban 6 minutos para el descanso. Incluso el F.S. Zamora pudo ampliar la renta por mediación del propio Héctor primero y de Ángel Sánchez después, pero se encontraron con un gran Rubén bajo palos.
Al igual que la pasada jornada, el equipo salió a morder tras el tiempo de asueto. Nacor definió a las mil maravillas un mano a mano con el arquero y puso el 1-3 cuando apenas se habían disputado 10 segundos. La intensidad de los zamoranos no bajó, pero Marcos recortó distancias para el Sani 2000 al batir a Javi Santos con fortuna. Con el partido roto por completo, fue Adrián Pelayo quien anotase el cuarto tanto para los de Alberto Grande. El joven ala aguantó la pelota en banda, se giró y colocó el balón por debajo de las piernas del meta para volver a poner el colchón de dos goles. Los dos juveniles fueron, sin ningún tipo de duda, la mejor arma de Alberto Grande.
No bajó la intensidad el F.S. Zamora. De hecho, Jorge Gutiérrez no acertó en el disparo tras burlar a 3 rivales y dos minutos más tarde, fue Ángel Sánchez el que sacó el cañón de su pierna izquierda para obligar al portero palentino a sacar una mano de mérito.Pero cuando más cómodo estaba el equipo, un saque de banda mal defendido permitió a Marcos anotar el segundo de su cuenta y recortar distancias.
A partir de ahí, el partido subió de revoluciones, el Sani 2000 impuso su estilo de juego y el F.S. Zamora sufrió. En los últimos 5 minutos se dieron multitud de interrupciones y el embotellamiento fue constante. De poco sirvió, porque el equipo estuvo impecable defensivamente y aguantó el chaparrón en una lección de pundonor. En el único despiste, Joselu salvó bajo palos el empate y aseguró tres puntos de oro en un final infartante. Con esta nueva victoria, el F.S. Zamora se coloca con 9 puntos en el casillero y esperará un pinchazo de Cuéllar frente al Cistierna para acercarse más aún al liderato.