La Federación de Castilla y León de Fútbol da por hecho que todos los jugadores, tengan ficha aficionada o profesional, podrán jugar la fase de ascenso a Segunda División B. Pese a que la normativa al respecto es clara, evitando jugar a aquellos deportistas aficionados que sus equipos decidieron no hacerles contrato profesional pese a ejercer de ello a todos los efectos en muchos de los casos, la Territorial confía en que todo se desarrolle como estaba previsto en un principio.
Las dudas surgían este domingo por la mañana cuando el portal IUSPORT se hacía eco del extremo de esta normativa. Una normativa que beneficiaba al Zamora, único equipo de todo el Grupo VIII de la Tercera División que ha cursado esta temporada ficha profesional a todos sus jugadores, y por tanto con todos ellos dados de alta en la seguridad social. El resto de conjuntos, Numancia B, Segoviana, Arandina se veían perjudicados por esta normativa, al tener a menos de la mitad de su plantilla como profesionales.
Pero el presidente de la Territorial, Marcelino Maté, en declaraciones publicadas por el propio portal IUSPORT expresaba su confianza en que la Junta modifique en próximos días esa normativa. Una modificación que desde la Federación de Castilla y León de Fútbol dan por hecha. Incluso, en caso de que no se modifique, podría interpretarse al antojo de lo que deseen las partes interesadas.
“Según la fuente consultada por Maté, a pesar de la literalidad del acuerdo, interpretan que la restricción sólo opera en los "deportes de contacto", no en los "deportes con contacto físico"”, explican en IUSPORT, haciendo referencia a que se trata de una interpretación y no de una aprobación explícita.
De esta forma, y tal y como estaba previsto, la Territorial no contempla que el Zamora salga beneficiado por una decisión del comité de expertos de la Junta de Castilla y León, y tratará de velar para que el play off se juegue tal y como estaba previsto.