Partido. Ilusionante y complicado a partes iguales. Ilusionante porque viajamos a casa de Orense, un club histórico del baloncesto nacional, y lo hacemos después de dos victorias que nos suponen un colchón de aire y nos permiten trabajar durante la semana con un poquito más de alegría e ilusión, si cabe.
Rival. Orense está haciendo un extraordinario inicio de temporada. Es el único equipo de la competición que se ha metido entre el grupo de los elegidos y está luchando cara a cara contra el top 6 de la liga. Lo está haciendo porque están jugando extraordinariamente bien, con un entrenador que los lleva de forma muy organizada y con criterio, lo que les ha permitido colocarse muy arriba en las clasificaciones estadísticas, siendo el equipo más valorado de la competición. Los dos últimos partidos del conjunto orensano se saldaron con derrotas ajustadas. El primero fue frente al Movistar Estudiantes, cayendo en la prórroga, mientras que en la jornada anterior fueron superados en el último segundo por el Grupo Ureta Tizona de Burgos. Estos resultados, aunque adversos, reflejan la competitividad y el alto nivel del Ourense, que ha demostrado estar a la altura de los equipos más fuertes de la categoría.
Caja Rural CB Zamora. Llegamos con la confianza reforzada tras encadenar dos victorias consecutivas, algo que hace que el equipo ahora crea un poquito más en sí mismo, que entienda que el trabajo que estamos haciendo va por el buen camino y que pensemos que, haciendo las cosas bien, podemos tener opciones de competir. El objetivo es llegar a unos últimos minutos de partido equilibrado y con opciones reales de podernos llevar la victoria.