El coronavirus hizo saltar por los aires la gran mayoría de aspectos de la vida en este 2020, y el deporte no fue ajeno a ello. Hasta el mes de marzo, las competiciones por equipos y los deportes individuales se desarrollaron con normalidad, pero es precisamente a partir de marzo cuando prácticamente el cien por cien de los deportes inician sus fases decisivas. Es por ello que 2020 fue, a nivel deportivo, un año de transición para todos.
La mayoría de competiciones con intereses zamoranos se detuvieron, asegurando la categoría todos los equipos de la provincia que estaban inmersos en la lucha por la permanencia. Además, aquellos equipos que estaban en plazas de ascenso, lograron dar el salto para iniciar la segunda parte del año en categoría superior, salvo el Atlético Benavente, que tuvo que jugar la fase de ascenso para ganarse el derecho de retornar, más de tres décadas después, a la Segunda División. Por lo tanto, el 2020 deja principalmente dos noticias deportivas en Zamora por encima del resto, el ya mencionado ascenso del Atlético Benavente y el ascenso del Zamora CF, y una aspiración claramente frustrada, la de Carlos Garrote.
En cuanto a la noticia más positiva del 2020 llegó de la mano del Zamora CF. Los rojiblancos se medían en el mes de enero al Mallorca, equipo de Primera División, en Copa del Rey y se quedaban a un paso de acceder a la tercera ronda, al caer por la mínima (0-1). Pero lo importante estaba en el campeonato liguero.
Tras el parón en marzo, la Federación decidió que las fases de ascenso se disputaran en formato de ‘final four’ en una sede neutral, y el Zamora doblegó al Numancia B (2-1) en semifinales y a la Gimnástica Segoviana (2-1) en la final para volver a Segunda B. Tras cinco años en Tercera, el Zamora regresaba a una categoría de bronce que ha sufrido una importante revolución con más de cien equipos. Ese 25 de julio, el Zamora lograba un ascenso en Palencia 20 años después de conseguir el último.
En la segunda parte de 2020, el Zamora finaliza a un punto de los puestos de ascenso a Segunda A y con el duelo ante otro Primera División, el Villarreal, en el horizonte en Copa del Rey.
Mientras, la mayor aspiración frustrada en este 2020 tiene que ver con los Juegos Olímpicos. Tokio 2020 era la oportunidad más clara que se le presentaba a la provincia de Zamora para que uno de sus deportistas lograse la primera medalla de la historia en unos Juegos. Carlos Garrote tenía opciones reales de medalla, después de un ciclo olímpico estelar, sacando medalla en cada campeonato importante. Pero el coronavirus obligaba a aplazar los Juegos y también a cortar la gran trayectoria de un Carlos Garrote que se encontraba en plena madurez, preparado para asaltar el podio olímpico.
Ahora, deberá esperar a 2021 para ver si las buenas sensaciones se mantienen y hay opciones de que Zamora tenga por fin un medallista olímpico.