Después del 0-13 ante la Gimnástica Segoviana, la primera premisa con la que parte el CD Villaralbo en el duelo de este sábado ante la Virgen del Camino es limpiar esa mala imagen. Una vez que se logren superar esas heridas emocionales, mentales y también de juego, llegará el momento de crecer para intentar estrenar el casillero de puntos.
Es cierto que el calendario está siendo tiránico con los villaralbinos y que la pretemporada no ha ido acorde a cómo debería haber ido tratándose de un equipo de Tercera. Pero el tiempo pasa y la escuadra de Benito está obligada a empezar a sumar si no quiere partir desde el inicio con una desventaja muy complicada de levantar.
De esta forma, este sábado, a partir de las cinco y media, los villaralbinos tendrán una nueva oportunidad de demostrar al resto de equipos del grupo que lo de la Segoviana fue un accidente y que el mal inicio de liga se debe a un cúmulo de despropósitos. Pero para mandar ese mensaje, la victoria ante la Virgen del Camino se hace necesaria. Una victoria que debe ser convincente ante un equipo que de momento no ha perdido en casa. Y es que los leoneses han logrado empatar ante el potente Atlético Astorga y ganar al Villamuriel el pasado fin de semana. No obstante, la Virgen del Camino se quedó la temporada pasada a un escaso margen de colarse en la fase de ascenso a la Segunda División B.
Jesús Benito va ganando jugadores semana a semana. Si el pasado sábado debutaba Álvaro de la Iglesia con la camiseta azulona, este sábado el turno será para el también zamorano Dani Mateos. Tras algo más de una semana entrenando, está preparado para jugar. Ahora será Benito quien decida si debe o no tener minutos en este duelo.
En definitiva, los villaralbinos parten con tres premisas básicas en su visita a la Virgen del Camino: mejorar la imagen del pasado sábado, mostrarse como un equipo sólido en el trabajo defensivo y sumar los primeros puntos de la temporada después de más de un mes de competición con el casillero a cero.