La baja del Reus en el tercer grupo de la Segunda B española ha traído consigo un vendaval de cábalas sobre clubes que podrían recoger el testigo de los catalanes para la 2019/2020. Tras su expulsión de la Segunda División, la administración concursal del Reus solo pudo entregar 150.000 de los 200.000 euros de aval requeridos para acceder a la Segunda División B.
A partir de este momento, la RFEF parece que llevará a cabo un proceso de selección para escoger al sucesor de la vacante dejada por los catalanes. Dicha situación deja un orden establecido en el que el principal beneficiado sería un club de Tercera División de la misma Federación autonómica (es decir, del grupo catalán); le seguiría un equipo descendido de Segunda B adscrito a la misma Federación autonómica; posteriormente, y en caso de no encontrar un candidato, podría optar a ella cualquier club de Tercera División; y finalmente el resto de conjuntos descendidos la pasada campaña del tercer escalafón del fútbol español.
La 2018/2019 dejó un caso similar cuando la U.D. Ibiza se quedó con la plaza del Lorca F.C. En esta ocasión, la plaza del Reus llegaría a costar un total de 630.000 euros al interesado, tal como ha explicado el periódico nacional Mundo Deportivo. El mismo medio informa que El Hospitalet es el principal interesado en acceder a Segunda B por medio del Reus, y su presidente ya ha llamado a la Federación catalana para conocer los detalles de la operación; en caso de que el equipo barcelonés no siguiese hacia delante con el proceso, el Peralada sería el siguiente club con orden de preferencia al haber descendido en Segunda B.
De no acceder ninguno de los dos cuadros mencionados, la vacante pasaría a estar disponible para los conjuntos con mejor coeficiente que se quedaron en la fase de ascenso a Tercera División de toda España. En ese caso, el Zamora C.F. ya podría optar a presentar su candidatura para acceder a Segunda B, quedando encuadrado en un grupo 3 en lugar del número 2, donde se encuentran los castellano y leoneses.
En caso de darse todas las circunstancias anteriores, los costes de desplazamiento se elevarían al disputar los choques en un tercer grupo junto a catalanes, valencianos y aragoneses.