Primera jornada liguera y primer triunfo. El Zamora CF conseguía la victoria en su debut ante el Júpiter Leonés en un encuentro discreto en el que empezó sufriendo pero terminó gobernando. Los leoneses fueron mejores en el inicio. Salió con todo el Júpiter, sin complejos. Un recién ascendido tuteaba a un serio aspirante al ascenso. Juego rápido, vertical, aprovechando los desajustes defensivos de un Zamora que no terminaba de encontrar el sitio.
Durante los primeros veinte minutos, los pupilos de Tornadijo estaban a merced del oponente. Tres ocasiones claras del Júpiter Leonés terminaron en el limbo solo por la falta de puntería de un equipo local muy prometedor pero que pagaba la bisoñez propia de un recién ascendido. El Zamora fue poco a poco encontrando el sitio. Dani Hernández y Sergio García empezaron a entrar en juego y Juanan y Carlos Ramos llevaban el duelo a su terreno. Empezaron entonces momentos de intercambio de golpes.
Villanueva salvaba al Zamora con una parada milagrosa en una falta directa que se colaba en la escuadra. Para entonces, los rojiblancos ya llegaban a le meta rival y probaban el nivel de Samuel, principalmente con tiros lejanos. Murci hacía temblar a la defensa con su presencia imponente en el área, pero no encontró el camino del gol.
Quien sí lo encontró fue Sergio García. Corría el minuto 44 y un desmarque de ruptura del zamorano era bien leído por Dani Hernández. El capitán servía un gran balón al espacio y Sergio García definía con la zurda de manera magistral. Primer gol del campeonato del Zamora obra de Sergio García y enorme asistencia de Dani Hernández. Descanso y victoria para el Zamora en un primer acto discreto de los pupilos de Tornadijo.
Ese gol serenó a los rojiblancos, que expulsaron la ansiedad y gobernaron sin excesivos apuros la segunda parte. Después de una salida de vestuarios fuerte del Zamora, en la que buscó el gol sin encontrarlo, llegó un periodo de espera. Murci, Dani y David Álvarez rozaron la diana, pero al no cerrar el marcador Tornadijo decidió replegar a su equipo para tapar huecos y cazar alguna contra.
En el tramo final David Álvarez encontró el premio a su insistencia. El asturiano robó en la medular al último defensa y tras recorrer en solitario cuarenta metros, definía con frialdad para salvar la salida de Samuel. Quedaban diez minutos, el Zamora hacía el 0-2 y cerraba la primera victoria de un equipos que es consciente de que el camino será largo. Eso sí, un camino que debe cimentarse en triunfos. El primero llegó en el debut. Que siga la racha.