A priori podía parecer una tarde tranquila para el CB Zamoraen casa. Los locales recibían a un UDEA Algeciras que se encontraba en elúltimo puesto de la tabla y sin conocer la victoria en esta 2020/2021. Además,los aficionados zamoranos, que no pudieron acudir al Ángel Nieto a causa de lasrestricciones, sabían que era la tarde para volver a ver con la camiseta de suequipo a Canda y Okonkwo.
Pero los andaluces dieron la sorpresa desde el primerminuto. El equipo local estuvo por delante con un momentáneo 3-2, pero a partirde ese momento llegaron los peores minutos del Innova Chef este curso. Los deSaulo Hernández estuvieron espesos de cara al aro y con menor ritmo que surival al confeccionar jugadas y abrir espacios. Las circunstancias fueronaprovechadas por el Algeciras, quien se puso por delante y cerró el primercuarto con un escueto 18-20 para sus intereses. Corta ventaja, entre otrascosas, dada por un doble tapón de Okonkwo que además recogió algún que otrorebote bajo su canasta.
El segundo asalto no fue mejor, y es que en los primerosminutos del segundo cuarto el cuadro local siguió por debajo de su nivel. Afalta de tres minutos y medio por jugarse para el descanso, los localesúnicamente habían sumado cuatro puntos frente a los 13 del rival, lo que poníacuesta arriba un encuentro donde Libroia parecía ser el único enchufado en laanotación. El italoamericano se fue a los 11 puntos personales, teniendo pordetrás a Mendicote con cinco. Por su parte, el Algeciras encontraba la canastapor igual, teniendo un reparto anotador muy coral que obligaba al CB Zamora amultiplicar esfuerzos.
El porcentaje de acierto reflejó la situación concontundencia, mostrando a un Innova Chef tanto en lanzamientos de dos como detres por debajo de cincuenta por ciento. Así se llegó al descanso, con la peorimagen de unos zamoranos que, pese a todo, mantuvieron la cara y se quedaroncon un 30-35 que daba esperanzas para un posible cambio de rumbo.
El rumbo terminó cambiando en el tercer cuarto. Loszamoranos salieron a por todas y además se encontraron con un UDEA Algecirasque tenía una marcha menos que en los veinte minutos anteriores.
Libroia siguió comandando a los suyos, dirigiendo el juego ypenetrando hacia canasta en varias acciones que tuvieron buen resultado.Además, Sergi Costa ponía por delante a los suyos con la canasta del 40-39 alos cinco minutos después de estar desde los primeros instantes del partido pordetrás.
La calidad salió a relucir a partir de ese momento, estandoel equipo más suelto. Y con menos presión los de casa volaron. Todos losminutos pasados quedaron en el olvido y el equipo logró ponerse por delante cononce puntos de ventaja. Finalmente el tercer cuarto terminó con un 56-48 quereflejaba el cambio de tendencia del encuentro.
En la primera jugada elaborada del rival obligaron a este aagotar la posesión, lanzando con un defensor encima y quedando en nada. Pero elAlgeciras siguió apretando y se puso a cuatro puntos aprovechando lasimprecisiones en ataque del Innova Chef.
Los ataques siguieron siendo errores, fallándose un trescontra uno cuando todo parecía de cara y que daba oxígeno al contrincante. Ortegapuso todo patas arriba con un triple que se transformaba en el 59-57 en elmarcador. En esta situación tuvo que salir al paso Okonkwo machacando el arogracias a una asistencia de Libroia.
El equipo empezó a desarrollar más las jugadas para no dar másventajas al rival, buscando espacios y en una de esas aparecieron Molins yCosta con sendos triples que sirvieron para que el Innova Chef se fuese nuevepuntos por encima. El rival lo intentó pero el CB Zamora ya no levantó el pie del acelerador y a cada golpe respondió rápidamente. Así se llegó a un final donde los zamoranos se impusieron por 73-70 después de enseñar su peor cara del curso.