Valoración. El equipo ha entrado bien al partido, hemos tenido unos índices de eficacia que otros días no hemos tenido. Han sido muchas las semanas que el nivel de acierto no se correspondía con las ocasiones que hemos tenido. Hoy sí tuvimos acierto, aunque ha habido partidos en los que tuvimos más ocasiones.
Mantener nivel. En el minuto 13 ya sentenciamos el partido, pero me voy satisfecho por mantener la humildad y el respeto al adversario. No se han visto cosas poco apropiadas en el campo. No hay mejor manera de respetar al contrario que jugar igual y sin florituras aunque el resultado sea muy positivo.
Concentración. Lo más difícil después de los cuatro goles en trece minutos era mantener la concentración. Igual la bajamos un poco al final de la primera parte pero luego seguimos buscando más goles y fuimos rigurosos atrás. El resultado final fue fruto de eso.
Ambición. Hay que tener hambre, ambición. Lo difícil con este resultado es mantener la mentalidad y la mejor manera de respetar al adversario es seguir yendo al ataque, con intensidad y rigor, y eso era lo complicado después del 4-0. El hambre del equipo no ha bajado.
Despejar dudas. En otras jornadas el juego era similar pero no había acierto. La Bañeza, Tordesillas… ha habido muchos partidos de poder ganar con holgura en el que no tuvimos acierto y la consecuencia fue llegar al tramo final apurados. Si matas el partido como hoy se ven espacios, el equipo crece en confianza, en seguridad y la línea del equipo es ascendente.
Euforia. Hemos ganado tres puntos. Estamos contentos pero hay que pensar ya en el Ávila. Esto no para y el resultado a partir del lunes ya no vale para nada.
Rival. La Cultural ha venido con bajas importantes, con jugadores que quizás no tenían el mismo ritmo de competición y lo han podido acusar. Eso ha influido y hay que reconocerlo.