El CB Zamora visitaba este miércoles a Alcobendas en duelo aplazado por coronavirus semanas atrás. Lo que parecía un duelo de trámite para los zamoranos en la fecha en la que debía jugarse la contienda, se convirtió en un duelo de mucha dificultad esta semana, después de la mejoría mostrada por los madrileños en las últimas semanas. Por su parte, los de Saulo Hernández se presentaban al choque sin Namdy y Canda, que no estaban inscritos cuando debía disputarse la contienda, y con la duda de Molins.
La salida de los zamoranos fue nefasta, ni acierto en ataque ni intensidad defensiva. Desde el inicio Alcobendas logró las primeras ventajas. Con el 14-4, Saulo Hernández se vio obligado a solicitar el primer tiempo muerto del partido. Pese a intentar cambiar la tendencia, Hernández no lo consiguió y la apatía de su equipo, especialmente en defensa, permitió a los locales dar carpetazo al primer cuarto con un 25-11 imponente. Solo Libroia quería salvar la cara de un equipo que traía malas sensaciones desde el choque ante Gijón.
El segundo cuarto fue más equilibrado, aunque el CB Zamora jugaba sin red, sin margen de error, y siempre haciendo la goma en el resultado para que Alcobendas no matara el partido. Los zamoranos fueron recuperando terreno y con 35-29 tuvieron ataque para rebajar la desventaja por debajo de los cinco tantos. Pero ese fallo desesperó de nuevo a los de Hernández, que recibieron otro duro parcial para irse a un 40-29 que obligó al técnico zamorano a parar de nuevo el choque. El descanso llegaba con 45-31, favorable a los locales.
El CB Zamora estaba obligado a poner más intensidad en la defensa para evitar que el rival se fuera a los cien puntos, tal como estaba yendo la proyección de anotación. Más allá de que entraran o no las canastas, era clave mejorar en defensa, y los de Saulo Hernández lo lograron. Faltaba inspiración ofensiva, pero estaba claro que no era la tarde de los zamoranos y aunque se adjudicaron el tercer parcial por 14-16, se entraba en el último cuarto por un difícil 59-47.
Con Libroia como principal referente en la ofensiva, el CB Zamora salía al último cuarto decidido de remontar, pero era incapaz de enganchar buenos parciales para inquietar a Alcobendas. De nuevo los de Saulo Hernández tuvieron opciones de apretar el partido. Los zamoranos, con un Carroll más fino en la anotación, colocaban el 59-52 y dispusieron de dos ataques para haberse puesto a cinco puntos o menos, pero otra vez no aprovecharon ese momento en el duelo y Alcobendas pegó el tirón definitivo para acabar llevándose el duelo por 71-62.