Los aurinegros se veían las caras este domingo con el filialdel Real Valladolid en un duelo de gran importancia para ambos. Empatados en latabla –aunque los vallisoletanos con un partido más-, una victoria para loscajeros suponía adelantar al rival y sumar un segundo triunfo que lespermitiera escalar posiciones.
En el primer cuarto se pudo ver un tanteo por parte de losdos equipos. El Virgen de la Concha estuvo fallón de cara al aro, errandoalgunos lanzamientos y con ciertas dudas a la hora de elaborar, pero aguantó eltipo frente a unos locales que mostraron las mismas dudas en la parcelaofensiva.
Deus Vera fue el faro del Virgen de la Concha en estosprimeros diez minutos, anotando seis de los 15 que logró su equipo. Un cuartoque terminó con un 18-15 en contra, pero con buena dinámica en el bandozamorano.
La cosa cambió en los siguientes diez. El Caja Rural sacó arelucir su poderío bajo el aro en defensa y encadenó varias canastas. Todo ellodespués de unos primeros minutos donde los espectadores no pudieron disfrutarde puntos, ya que lanzamiento que había en la cancha, lanzamiento que noentraba.
Con defensa en zona, los aurinegros fueron forzando a losvallisoletanos, quienes tuvieron serios problemas para encontrar disparoscómodos y cuando soltaban el balón se encontraban con un rebote defensivoimpecable de las torres zamoranas. López Vera fue el encargado de estrenar lospuntos de este segundo cuarto con un tiro libre, anotando minutos más tardeotro y poniendo el empate a 18.
A partir de ese momento apareció la apisonadora cajera. Elequipo encontró fluidez y realizó buenas jugadas como un pase interior a Kasseque terminó en falta personal bajo el aro. Robles Navarro con un triple yKingala con cuatro puntos pusieron al Virgen de la Concha con un importante22-29, distancia que terminó ampliándose hasta el 25-35 con el que se llegó aldescanso gracias a las anotaciones de López Vara, con nueve, y Robles Navarro,con siete, en sus cuentas personales.
No obstante, la ventaja desapareció en el tercer cuarto. Sibien el equipo había anotado 20 puntos en el segundo cuarto, en estos fue elReal Valladolid el que igualó esos guarismos. Los de casa empezarondubitativos, viendo como el Virgen de la Concha anotaba un triple de RoblesNavarro al poco de empezar, pero cambiaron rápidamente la situación.
A los cuatro minutos la ventaja visitante ya era solo decinco puntos, pasando a ser de tres un minuto y medio después. Los aurinegrospagaron caro la falta de acierto, encadenando fallos a corta y media distanciae incluso algún tiro de tres que no tocó ni aro. Por su parte, el Valladolid apretódefinitivamente el duelo a falta de cuatro minutos con el 42-43, que se moviópoco de ahí hasta el final para irse definitivamente a un 45-45.
Robles Navarro volvió a aparecer para dar un empujón a suscompañeros, anotando un triple al comienzo del último cuarto para alivio detodos. Además, una combinación que concluyó en una buena entrada bajo el aro deDeus Vero daba una ligera ventaja al Virgen de la Concha para ponerse pordelante con un 45-50.
El Real Valladolid respondió, pero se encontró con unarespuesta rápida de Talamino en la siguiente jugada que volvía a dejar laventaja en cinco puntos para desesperación del banquillo local. Así se llegó a la recta final, con 51-60 que mostraba la superioridad visitante en ambas canastas, dejando a un Caja Rural dominador en defensa y con buen posicionamiento para no dejar espacio a que el rival cogiese rebotes ofensivos.
Finalmente el Caja Rural de Zamora se llevó el duelo con un solvente 53-62 que permitió olvidar el tropiezo del tercer cuarto y sumar el segundo triunfo de la temporada.