El CD Zamarat Quesos El Pastor perdió en casa de Araski en un duelo que se decidió en el tramo final, principalmente por el rebote ofensivo que sonrió al conjunto vasco en los momentos claves. Fue un duelo muy igualado en el que Ángel Fernández volvió a apostar por la defensa en zona durante casi la totalidad de la contienda. Una defensa que exige mucho a las jugadoras y que de nuevo dejó patente la solidaridad y el compromiso de las integrantes del CD Zamarat.
Las primeras ventajas fueron para Araski y Ángel Fernández paraba el choque con un 17-11 en el marcador. Ese tiempo muerto ayudó a las zamoranas y lograban empatar a 20 tantos a falta de poco menos de dos minutos para el final del primer cuarto. Ambos equipos se encontraban cómodos desde el perímetro y de ahí el marcador elevado con el que se llegó al final de los primeros diez minutos. 24-23 para Araski.
Pero la buena dinámica mostrada por el CD Zamarat en el tramo final del primer cuarto se extendió en el inicio del segundo periodo para lograr un parcial de 0-11 y llevar el luminoso al 24-31. Fue una de las mayores ventajas de las que dispuso el equipo de Ángel Fernández en el pabellón vasco. Araski intentó reaccionar, pero Zamora se fue al descanso mandando en el marcador por 35-41. Okonkwo, Wolf y Berezhynska estaban destrozando a las locales con 28 tantos entre las tres.
El paso por vestuarios sentó mejor a Araski, que empezó a dinamitar la defensa en zona de Zamora con mayor acierto en el lanzamiento. Además, el poderío interior de las zamoranas empezaba a igualarse y la pintura comenzaba a dividirse. Un parcial de 6-0, pasado el ecuador del tercer parcial, devolvía la ventaja a las locales después de muchos minutos: 48-47. Araski ponía más intensidad a su defensa, pero pese a todo, una incombustible Okonkwo seguía liderando a su equipo y una penetración de la interior naranja llevaba el partido al último parcial con 48-50 con ventaja para Zamora.
En el cuarto decisivo, al CD Zamarat le costó un mundo anotar, Araski fortaleció su defensa y taponó casi todas las opciones de anotación del plantel de Ángel Fernández. En ataque, el conjunto vasco no estuvo fino, salvando a Quevedo, en el lanzamiento de dos, y Asurmendi, en el triple, pero la clave estuvo en el rebote ofensivo, ya que mientras Zamora era incapaz de generar segundas opciones, Araski capturaba rebotes en el aro zamorano para gozar de segundas, terceras y cuartas oportunidades. Eso, sumado al talento natural de jugadoras ya contrastadas de un equipo vasco que por plantilla debería terminar muy arriba en la liga, llevaba el partido al resultado final de 69-63.