El FS Zamora se desquitaba este sábado del agrio empate cosechado hace siete días en Cuéllar y lo hacía con una importante goleada ante el Ventorrillo FS. Los pupilos de Chema Sánchez volvieron a mostrar mucha solidez en defensa, cediendo muy pocas ocasiones, y aunque tuvieron problemas para hacer gol durante la primera media hora de duelo, se desbocaron en unos diez últimos minutos en los que anotaron hasta cinco tantos.
La primera media hora se selló con un exiguo 2-1. Fue un primer acto muy igualado, con muchas imprecisiones, errores por los dos bandos y con los dos porteros haciendo un buen papel en acciones de peligro. Sergio Simón adelantaba a los locales a los tres minutos, aunque el Ventorrillo empataba el choque con una diana en propia meta de Mario solo dos minutos después. Afortunadamente, solo unos segundos después, Aitor devolvía la ventaja de un tanto al FS Zamora.
El marcador ya no se movería al descanso, pese a que los rojiblancos tuvieron la posesión, las llegadas y hasta tres ocasiones claras que desbarató Iván bajo palos. También Mandado hizo una buena parada tras una pérdida en transición de los locales. Con ese marcador llegaba el asueto. El paso por vestuarios cambió poco el partido. Mucha igualdad y respeto entre ambos. Pero a falta de doce minutos todo cambió.
En doce minutos los aficionados vieron hasta siete goles, seis para los rojiblancos y uno para los gallegos. Matos en el 28 y Pablo en el 30 colocaban lo que parecía un tranquilizador 4-1, pero un tanto de Andresín en la siguiente acción rebajaba de nuevo la ventaja. Restaban ocho minutos y los locales todavía tenían mucho por trabajar. Un trabajo que se tradujo en goles. Javier y un inspirado Sergio Hernández, que hizo un hat trick en apenas cinco minutos, cerraron el definitivo 8-2.