El FS Zamora salía a la pista del Ángel Nieto con el objetivo de endulzar en la medida de lo posible el descenso a Tercera División. Cinco minutos tardarían los locales en inaugurar el marcador, por mediación de Nacho, pero el Guardo FS reaccionaría casi inmediatamente igualando el electrónico.
No le sentaba bien a los zamoranos el gol, puesto que pasaría los siguientes compases defendiendo las embestidas palentinas, que pese a sus esfuerzos no llegaban a tirar entre los tres palos. Pasada la mitad de la primera parte, la tónica del partido daría la vuelta, pero esta vez era el FS Zamora el que no creaba peligro, tirando únicamente desde larga distancia.
Con ambos equipos intentando adelantarse en el electrónico, el último minuto de la primera parte estaría plagado de faltas y protestas por parte de ambos equipos, pero sin conseguir sacar ningún rédito a nivel deportivo.
El Guardo FS salía de vestuarios como una exhalación para ponerse por primera vez por delante en el marcador. Lejos de reaccionar positivamente, los de Alberto Grande se veían encerrados en su área, recibiendo las estocadas esta vez más efectivas de los palentinos. Después de varios intentos conseguirían aumentar su ventaja en el 5 de la segunda parte, en el que parecía comenzar la pesadilla para los zamoranos. El Guardo, ni un minuto más tarde, ponía el 1-4 en el marcador.
Sin embargo, el FS Zamora no dejaba que los visitantes disfrutaran de esa cómoda ventaja, puesto que Magi fusilaba al portero desde la zona de tres cuartos en un auténtico golazo. A partir de entonces, los zamoranos luchaban por abandonar la Segunda División B con buenas sensaciones.
Con la táctica de portero-jugador en ataque, los locales gozaban de más ocasiones de gol, pero no terminarían materializándolas, llegando al final del encuentro con el definitivo 2-4, con el que el FS Zamora se despide de Segunda División B.
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