Quesos El Pastor tampoco gana con cambio en el banquillo. Fran García debutaba este viernes en el banquillo del CD Zamarat tras el cese de Ángel Fernández y el resultado fue el mismo que en ocho de las nueve jornadas anteriores: la derrota. Eso sí, fue un duelo de menos a más, dejando la segunda parte un pequeño halo de esperanza para las zamoranas, de cara a buscar la reacción tras el parón liguero que habrá el próximo fin de semana.
La primera parte fue un reflejo de los principales problemas del CD Zamarat en lo que va de liga: muchos errores en los lanzamientos y sobre todo una clara falta de intensidad en defensa, algo que aprovechó Zaragoza para anotar hasta 46 puntos al descanso. Un guarismo imposible de tolerar si las zamoranas querían tener opciones de triunfo. Gatling fue el principal látigo de un equipo maño que se iba al descanso con un marcador muy favorable de 46-32.
El partido no estaba cerrado, pero la sensación era que las zamoranas tendrían que cambiar mucho su actitud defensiva si querían tener opciones. Y todo sin Montoliu y Sagerer, que no pudieron sumar minutos. Una mejora que llegó tras el paso por vestuarios. Las pupilas de Fran García se ajustaron atrás y empezaron a defender con intensidad, lo que permitió que Zaragoza apenas sumara 9 puntos en ese cuarto. El problema llegaba en que las zamoranas conseguían una de las peores puntuaciones que se recuerdan en un cuarto, tan solo 6 tantos.
Se entraba en el cuarto definitivo con 55-38, un guarismo especialmente bajo en el marcador de Quesos El Pastor, con el que era imposible ganar el choque. Pero el CD Zamarat estaba yendo de menos a más en defensa y solo tenía que encontrar el camino en ataque para, al menos, caer con honor.
Y lo hizo, gracias a un último parcial que dejó muy buenas sensaciones en el vestuario naranja. Salas, Lizarazu y Okonkwo empezaron a encontrar el aro con más facilidad y ponían a su equipo a ‘solo’ nueve puntos cuando restaban dos minutos para el final (67-58). La remontada era casi imposible, aunque las de Fran García creyeron hasta el final y apretaron para acercarse a una mínima desventaja de ocho puntos. No obstante, no fue suficiente y el duelo cayó del lado local por 70-60.