Hasta ahora, según explicaba este lunes el presidente del club Segismundo Ferrero, “ningún jugador ha dado un no rotundo a la oferta de renovación que le hemos presentado”. El Zamora está ofreciendo contratos a la baja a aquellos futbolistas que mantenían relación con el Zamora desde hace unos años, y está subiendo de forma leve a aquellos jugadores que recalaban en la capital del Duero esta temporada. En ambos casos, siguen siendo cantidades modestas y que no acaban de satisfacer a los futbolistas que están a la espera de lo que puede deparar el mercado en próximas semanas.
Hay que recordar que Roberto Aguirre ha dado el visto bueno a la continuidad del bloque, ya que deportivamente cuenta con prácticamente todos los jugadores de esta temporada, pero es la directiva la que tiene negociar el aspecto económico.
Eso sí, pese a que las previsiones apuntan a que gran parte de los futbolistas acaben por marcharse del Zamora, el presidente es optimista después de las charlas mantenidas con ellos: “Tanto ellos como yo tenemos claro que si llega alguna oferta de Segunda División es lógico que la cojan y no acepten la renovación. Pero si estamos hablando de equipos de Segunda B, tendrán que pensárselo bien porque aquí a lo mejor el salario es más bajo pero está asegurado y saben que van rendir en el ámbito deportivo”, explicaba Segismundo Ferrero.
Lo cierto es que jugadores como Alberto Prada tienen casi imposible seguir, teniendo en cuenta que tienen ofertas de superioridad categoría. Una situación que podría extenderse a otros futbolistas como Jacobo Trigo o Rubén Sánchez.
Diferente puede ser el caso de un jugador como Hugo Aguado. Desde hace semanas, la gente cercana al futbolista ha comentado el deseo del jugador de dejar el fútbol en un segundo plano y dedicarse a aumentar su formación académica. Algo que le alejaría del Zamora la próxima temporada. Pero de momento, ni club ni jugador han estimado oportuno confirmar o desmentir esa situación a este medio. Se trata de un futbolista que, por unas u otras circunstancias, apenas ha contado con minutos en las siete temporadas que ha estado en el primer equipo y ese sería el motivo por el que se desencadenaría su marcha del club rojiblanco buscando una salida en el mundo del fútbol o en la parcela academico-laboral.
Pese a esta incertidumbre que existe a día de hoy, el propio Ferrero recuerda que el objetivo es llegar al inicio de la pretemporada con prácticamente la plantilla configurada al completo, algo para lo que aún restan casi dos meses.