No pudo el CB Zamora encadenar la segunda victoria de la temporada. Y eso que lo tuvo muy cerca este miércoles en Vitoria. Los zamoranos se medían al Baskonia y en un choque repleto de rachas para los dos equipos, cualquiera de los dos pudo haber ganado. Finalmente fue la escuadra local, que tuvo más temple y clarividencia en los momentos claves del choque. Unos momentos en los que el balón quemó en un CB Zamora que una vez que no encontró las manos de Sango, se vio muy penalizado a la hora de buscar alternativas de jugadores que tomaran la responsabilidad con acierto.
El equipo blanquiazul cuajó un horroroso inicio de partido con un parcial de 22-10. Un mal inicio que se prolongó en el segundo cuarto donde las desventajas rozaron los veinte puntos. Los pupilos de Saulo Hernández no eran capaces de encontrar el aro rival con facilidad y la fluidez no existía. Ni el lanzamiento exterior ni el juego en la pintura daban redito a un equipo que se mantenía con vida gracias a la defensa. Pero una reacción positiva antes del descanso dejaba el duelo abierto con victoria local por 38-29.
El Queso Zamorano mostró su mejor imagen en el tercer parcial para consumar la remontada y entrar en los diez minutos decisivos un punto arriba (49-50). Sango y Libroia lideraban una remontada en la que también se unían Warren y el recién llegado Meikle. Parecía que la marcha ascendente en el partido daría la victoria al CB Zamora, pero el último parcial fue de una igualdad máxima.
En esa parte decisiva el que mejor logró controlar los nervios fue Baskonia, que hizo un último minuto y medio muy intenso, con un parcial de 6-0 que le permitió coger la ventaja suficiente para saber gestionarla y ganar por 78-73 aprovechando que los zamoranos no encontraron a Sango con facilidad y el resto de compañeros no tuvieron fortuna en esos momentos decisivos.