El pabellón Ángel Nieto albergará este miércoles a las 20:00 horas la segunda ronda de la Copa del Rey. Un premio para unos zamoranos que vencieron al Ciudad de Málaga por 23-28 en la primera eliminatoria.
Pese a las bajas que obligarán a Leo Álvarez a tirar de juveniles para completar la convocatoria, los pistachos tienen ganas de volver a enfrentarse a un Puerto Sagunto que fue su verdugo en la fase de ascenso. Ganas de revancha que deja claras el técnico zamorano, afirmando que “si no pudimos meterles mano en la fase de ascenso, lo que deseamos es meterles mano ahora” aunque no olvida que el objetivo primordial es “competir” ante un rival de Asobal.
Un plantel valenciano que únicamente ha sumado dos empates en sus siete primeros partidos de liga, y que el pasado sábado cayó de manera contundente ante el Barcelona por 46-25, firmando su tercera derrota consecutiva. Pese a ello, Álvarez no se fía de un equipo que se ha visto lastrado por las lesiones en estos primeros compases del curso, y que va a venir a Zamora “con ganas de competir y de hacer las cosas bien”.
Por su parte, el Balonmano Zamora tratará de coger la medida a un Puerto Sagunto que conocen bien, con el que tienen cuentas pendientes y al que buscarán alargar su mala dinámica para, por el contrario, mantener la estela del Rutas del Vino una eliminatoria más en la Copa del Rey.
Objetivo al que llegan después de sumar por 30-28 ante el Handbol Bordils el pasado fin de semana su segundo triunfo liguero, segundo en el Ángel Nieto. Lugar al que se encomendarán para conseguir recuperar sensaciones, olvidar los problemas de enfermería y demostrar el potencial de una plantilla que quiere seguir viviendo el sueño copero.
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