Los primeros aficionados pistacho llegaban a Santander en torno a las dos y media de la tarde. La playa del Sardinero se tiñó de pistacho con los cánticos y los ánimos de una expedición que fue juntándose para entrar en bloque al Pabellón de La Albericia. Una vez en el recinto deportivo, los zamoranos se unieron en la zona de preferencia para aunar sus voces.
El choque fue relajado en el marcador. Los aficionados se dejaban la voz y eran correspondidos desde la cancha con un MMT Seguros que comandaba el marcador desde el primer instante. A medida que se llegaba al final del duelo, los seguidores empezaban a mirar qué hacían los rivales directos del equipo de García Valiente.
El duelo en Santander acababa con victoria por diez goles del BM Zamora, pero no fue hasta un minuto después cuando estalló la alegría al confirmarse la victoria de Benidorm. La liga Asobal estaba ya conseguida y la hinchada bajaba a la pista para celebrar el ascenso mano a mano con los héroes que se dejaron la piel en la cancha para llevar a Zamora a la elite.