Como siempre que un equipo regresa de un parón relativamente prolongado, había dudas de saber cómo afrontaría el Zamora Club de Fútbol la primera jornada después del descanso navideño. Antes de que el balón comenzase a rodar, Balta ya sorprendía en el once con la presencia de Andoni en el puesto de central, el desplazamiento de Edu Ruiz a la banda y el paso de Álvaro de la Iglesia al banquillo. A partir de ahí, el técnico salmantino disponía de su once habitual con la presencia de Juanan en la medular por Nacho Huertas.

Los zamoranos dieron una versión más discreta de lo habitual. El encuentro incómodo que tuvo que soportar el equipo de Balta antes del parón en Palencia ante el Cristo Atlético se alargó también al primer duelo del año 2016. Los rojiblancos se mostraron espesos, sin chispa, con dificultades para combinar y sobre todo incapaces de romper el buen trabajo defensivo de La Bañeza, que dejó una gran imagen en el Ruta de la Plata.

Pese a esa imagen pobre, el Zamora volvió a tirar de calidad para irse al descanso ganando. Una gran asistencia de Aarón Aguado en el minuto 35 de duelo la aprovechaba David Álvarez para avanzar a su equipo. Era el primer disparo entre los tres palos de los locales y les valía para conseguir ventaja. Por su parte, La Bañeza enviaba fuera dos remates en boca de gol y se encontraba con Miguel en otra acción de peligro. Por ocasiones, los bañezanos merecían mejor suerte, pero la calidad en Tercera División es fundamental y el Zamora tiro de un chispazo para decorar su mala primera mitad.

En el segundo acto La Bañeza siguió poniendo las ocasiones y el Zamora se mostraba incapaz de acertar con el último pase, lo que impedía ver acciones de peligro en la ofensiva del equipo de Balta. Dos balones al larguero, un gol anulado y una buena intervención de Miguel hacían presagiar que el gol de La Bañeza estaba cerca. Pero los minutos pasaban y los zamoranos aguantaban su portería a cero. Y cuando parecía que el gol bañezano era inminente otro chispazo del Zamora rompió el partido. Manu Moreira enganchaba una volea desde veinte metros y anotaba el segundo gol sobrepasando de vaselina al portero.

Quedaban quince minutos y ahí el partido se convirtió en un correcalles. El Zamora tuvo tres contras muy claras en superioridad que no logró convertir en la tercera diana, y eso lo aprovechó La Bañeza para acortar distancias. Varo ponía el 2-1 a falta de diez minutos para el final y le ponía emoción al tramo decisivo del encuentro. Pero los zamoranos tiraron de experiencia para parar el encuentro y llegar al final del choque con una importante victoria que le permite cerrar la primera vuelta con 46 puntos y con ocho puntos de ventajas con respecto al segundo, la Gimnástica Segoviana.

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