Nunca ha sido profeta en su querida Salamanca, pero Chema Sánchez, en siete años fuera de la capital charra y de su zona confort, acumula dos ascensos, cuatro ligas y cuatro play-offs, uno de ellos a Primera División con un Atlético Benavente que se quedó a tan solo un gol de la élite en Antequera.
Una trayectoria bien sabida en la provincia con tres campeonatos seguidos en los que aupó a lo más alto, en Segunda División 'B', a los equipos zamoranos: primero, con el extinto FS Zamora; posteriormente, y en doble ocasión, con el Atlético Benavente.
Ahora, en esta temporada 2023-2024, nuevo registro para el técnico verdirrojo: la consecución del título liguero con un InterSala Zamora que solo ha perdido uno de los 28 encuentros que ha disputado y el ascenso a una categoría que, por fin, ha llegado para el conjunto capitalino.
“Es un premio a una temporada muy regular en la que nos hemos puesto líderes desde la segunda jornada. No es casualidad hacer estos registros y ganar prácticamente todos los partidos”, afirma Sánchez.
Además, el técnico salmantino resalta una de las temporadas más dura que recuerda en Tercera División: “Por número de equipos, por los que descendieron de Segunda División ‘B’, por equipos como Villaquilambre, Cistierna, Unionistas ‘B’ o proyectos como Tierno Galván” ha sido la más dura que recuerdo de los últimos cinco años”, resalta.
Un año en el que ha ensamblado jugadores de diferentes contextos y en el que, de nuevo, ha mostrado su nivel al frente de la parcela deportiva, donde ha conseguido el ansiado ascenso a la Segunda División ‘B’ con mucho esfuerzo e innumerables kilómetros en coche para volver a demostrar su máxima: si apuestas por un sueño y te implicas al 200%, las cosas llegan.