El Ángel Nieto abría sus puertas a un encuentro entre el CB Virgen de la Concha y un rival diametralmente opuesto en la tabla como es el Chantada. A priori, un encuetro difícil para los aurinegros que, pese al esfuezo titátino poco pudieron hacer para mermar a un Chantada visiblemente superior.
El duelo comenzó con un minuto de silencio por el recientemente fallecimiento de Kobe Bryant. Tras ello, el duelo comenzó con un Virgen de la Concha inseguro en pista, algo que no tardó en dejarse ver en el luminoso con una diferencia de ocho puntos a favor de los visitantes. Una ventaja que no duró mucho ya que poco a poco los aurinegros ganaron confianza recortando distancia.
El avance de los locales puso en alerta al Chantada que, tras el tiempo muerto, regresó a la cancha reforzado por un triple que volvía a marcar la superioridad de los gallegos. Pese a ello, el esfuerzo titánico de los locales logró cerrar el primer cuarto con un 21-24 en el marcador.
El segundo cuarto dejaba entrever igualdad entre ambos conjuntos con un Virgen de la Concha que se desinflaba por momentos con una defensa descuidada que el Chantada no dudó en utilizar a su favor, lo que terminó con una vista en el descanso de 32-47.
A la vuelta de vestuarios, las bajas del Virgen de la Concha se traducían en un cansancio de sus jugadores que, sumado a la supremacía del rival, dejaba diez minutos con tan solo cuatro tantos de los locales que ya dejaba entrever el adiós a una posible remontada con el Chantada doblando los tantos de los de Nacho Domínguez 38-65.
El último tiempo, con la crónica de una derrota ya anunciada desde el descanso, el equipo visitante siguió demostrando que su visita a Zamora, como número dos de la tabla, tenía como único objetivo la victoria. El Virgen de la Concha usó sus últimos minutos en la cancha para mostrar su mejor cara y finalizar el encuentro por encima de los 50 puntos. Finalmente el duelo tuvo un desenlace de 55-85.
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