El comienzo del encuentro no podía pintar mejor para un equipo de Castilla y León en el que Adrián, jugador del Zamora, era titular. La Selección jugando como sabe: ordenada y arriba. Hacía sin muchas dificultades su juego de identidad. Roberto Puente marcaba el primero de los tantos tras una falta lateral de Zazu, el roce del balón por parte de Mato y la finalización de Puente. El segundo, tres minutos más tarde, salió de las mismas botas. Puente recoge un balón mal rechazado por un defensa y la metía en la red rusa. Sin problemas. Sin agobios. Jugando y marcando. Con otra media docena de oportunidades claras de gol.
Rusia sacaba, sólo de vez en cuando, sus armas, y realizaba un juego muy duro. Llorian lo sufrió en primera persona a la media hora de juego tras un golpe en el pómulo que significó ocho puntos y un traslado al hospital. La Selección de Castilla y León protestó tanta dureza antes de la finalización de la primera mitad. A la vez, miraba de reojo el partido de República Checa - Irlanda.
Tras el paso por vestuarios, Rusia salía adelantada. A Castilla y León le costaba sacar balones y salir del área. En un buen centro, Rusia marcaba un tanto. Lo hacía el futbolista Nastavshev nada más salir al campo rematando con un buen gol. La Región Sur acortaba distancias y Castilla y León ponía el ojo en el campo de República Checa - Irlanda. Los arlequinados comenzaban a perder terreno sobre el tapete verde y fallaba alguna ocasión más.
El tiempo pasaba y aún el partido estaba ganado. Pero, a falta de quince minutos, el asistente pitaba penalti. La Selección castellano y leonesa, incrédula, se echaba las manos a la cabeza. Rusia tenía oportunidad de empatar y lo hacía. Ahora ya no había que mirar el partido ajeno, sino el propio. E intentar remontar lo empatado.
Juanan o Raly Cabral pudieron hacerlo pero no lo consiguieron y en una acción con el equipo arriba, Rusia pillaba a la Selección y ponía el 3 - 2. Castilla y León se quedaba fuera de la final en el tiempo añadido.
"Es difícil de entender este partido y el resultado. Hemos jugado bien, perdonado ocasiones y sufrido el juego ruso, muy muy duro y que ha parado el partido. El penalti nos hizo mucho daño, anímicamente, por cómo se desarrolló y por el empate. Ha sido el punto de inflexión. La victoria de ellos es ya fruto de nuestro querer marcar en los últimos minutos. Es momento de acordarse de muchas personas que han trabajado por esta Selección en este ciclo que comenzó hace dos años. También a nivel personal, por el esfuerzo de este grupo humano y nuestras familias durante este tiempo. Pero sobre todo es momento de pensar en estos futbolistas que se merecían estar en la final. Se merecían muchísimo más, por capacidad y trabajo", sentenciaba el seleccionador al finalizar el encuentro.