Y es que el equipo de Raúl Campano fue capaz de superar por 1-2 al Cuatrovientos, un rival que se ahoga en la zona baja de la clasificación. Un encuentro muy igualado, con mucha intensidad en el juego y con ocasiones de gol para haber llevado el encuentro de forma más cómoda para los rojiblancos. Al final, un 1-2 más que satisfactorio para un Zamora infantil que comienza el año 2015 con muy buenas sensaciones.
La cara negativa del fin de semana fue para el conjunto cadete, que también tenía un duelo trascendental en Valladolid y caía por 3-1 ante el Parquesol. Los rojiblancos comenzaron ganando en la primera mitad. Erik adelantaba a los zamoranos a la media hora de juego con un golazo. Con ese 0-1 se llegaba al descanso, en un buen primer acto del meta rojiblanco que mantenía con vida al Zamora.
Pero en la segunda parte la decoración cambió. El Parquesol apretó de inicio y consiguió darle la vuelta al marcador en apenas cinco minutos cuando el segundo acto caminaba por el cuarto de hora. Tras esas dos dianas, el Zamora volvió a reaccionar y a tener más presencia en la parcela ofensiva, pero cuando mejor estaban jugando los rojiblancos y tras fallar un mano a mano, llegó la sentencia del Parquesol en el tramo final. Una sentencia que significó una derrota que deja a los cadetes del Zamora en una situación delicada de la tabla.