Que el Club Piragua Ciudad de Zamora es una gran familia queda patente durante todo el año, pero se hace aún más palpable en la habitual cena de final de temporada. Más de setenta personas entre piragüistas y familiares compartieron mesa y mantel este viernes por la noche para despedir una campaña que ha vuelto a estar repleta de buenas noticias para los palistas de la entidad zamorana.
La velada estuvo envuelta en el habitual buen ambiente que siempre rodea a este club y además contó con un asistente de excepción, el campeón olímpico Marcus Cooper. El piragüista balear tiene un importante nexo con la provincia de Zamora, ya que uno de sus fisioterapeutas de confianza es el zamorano David Rivera. Por eso, no dudó en aceptar la invitación del Club Piragua Ciudad de Zamora.
Desde su llegada se mostró muy cercano a todos los piragüistas jóvenes que le sacaban algunas palabras. Aunque tímido, Cooper firmó autógrafos y se tomó multitud de fotografías con los que algún día sueñan ser como él. Antes de la cena, todos los deportistas se hicieron la foto de familia con el invitado de honor de la noche. A continuación, una cena envuelta en un ambiente distendido, que estuvo presidida por los trofeos ganados por el Club Piragua Ciudad de Zamora durante una temporada a la que este viernes se le echaba el cierre.
El campeón olímpico Marcus Cooper clausura una gran temporada del Club Piragua Ciudad de Zamora
El club zamorano celebraba este viernes por la noche su habitual cena de final de temporada. En esta ocasión, la cena tuvo un asistente especial ya que el campeón olímpico Marcus Cooper aceptó la invitación del club para compartir velada con los palistas que durante toda la campaña han conseguido muy buenos resultados para la entidad.
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