El Caja Rural cierra su plantilla con la llegada del pívot Troy Mcindoe

Troy es un jugador muy físico, que aporta rebote e intimidación en la pintura y dotará al Caja Rural de la experiencia necesaria en una posición tan importante

 TROY MCINDOE
TROY MCINDOE

El center, con 2,04 de estatura, posee experiencia en la competición ya que la pasada campaña milito en el Angels Visions UPB Gandía encuadrado en el grupo E, con quién no acabó de cuajar pese a presentar unos números más que aceptables. En el mercado invernal fichó por el C.B. Agüimes donde coincidió con Jonathan Bosa, un viejo y querido conocido de la afición zamorana, donde firmo una media de 6 rebotes y más de 7 puntos por partido.

Esta temporada, fue uno de los objetivos de la escuadra de Vicente González en varios momentos de la configuración de la plantilla, pero no se pudo concretar su incorporación. Finalmente recaló en el conjunto irlandés de Tralee Warriors Basketball Club con quién realizó la pretemporada y disputó algún amistoso, pero la suspensión de la competición por culpa del COVID lo puso de nuevo en el mercado para acabar recalando en el conjunto cajero.

Troy es un jugador muy físico, que aporta rebote e intimidación en la pintura y dotará al Caja Rural de la experiencia necesaria en una posición tan importante. A pesar de contar con una plantilla con muchos centímetros, faltaba el músculo necesario con el que dominar el rebote en ambas zonas, aspecto que a buen seguro se reforzará con la llegada del jugador inglés. Troy dotará al equipo de mayor profundidad y recursos en una temporada atípica y complicada.

El próximo sábado, si la situación sanitaria lo permite, podrá debutar en el encuentro que enfrentará a los zamoranos con el conjunto burgalés del Nissan Grupo de Santiago tras haberse perdido el partido contra Conspur Bezana en lo que supuso la primera victoria de la temporada.

Toda la plantilla deberá someterse a las pruebas preceptivos este próximo miércoles para confirmar su estado y estará pendiente de las noticias que las autoridades vayan emitiendo para saber cómo realizar el desplazamiento a tierras del Cid, sobre todo en lo referente al regreso, fuera del horario marcado por el estado de queda.

En el plano meramente deportivo, los pupilos de Vicente González, van poco a poco asimilando los conceptos de juego marcados por el técnico malagueño, acoplándose y cogiendo ritmo tras el retraso en su preparación que provocó la suspensión de la primera jornada.

Tras el duro partido del pasado fin de semana, que se saldó con la victoria de la escuadra local tras el tiempo extra, la moral de los zamoranos ha crecido, aunque son conscientes de que aún queda mucho camino por recorrer y muchos aspectos por mejorar.

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