El Balonmano Zamora viajaba a tierras cántabras para estrenar el nuevo año buscando la victoria ante el Astander Astillero Balonmano, a la caza y captura de dos puntos que permitieran a los de Félix Mojón seguir la estela del líder y empezar el año de la mejor manera posible. Con esa convicción saltaron los Viriatos a la pista de La Cantábrica, que pronto fueron dejando huella de su superioridad sobre la tarima.
El combinado local apenas conseguía frenar las potentes acometidas de un conjunto zamorano muy acertado de cara al arco, por lo que la ventaja pronto se tornó en relativamente cómoda para el combinado pistacho, una ventaja nunca inferior a los tres tantos de diferencia. Así, la bocina decretaba el final del primer capítulo de esta novela que, claramente, se estaba escribiendo en pistacho, con un 12-17 a favor de los Félix Mojón.
Durante la segunda mitad, los pistachos no levantaron el pie del acelarador. Todo lo contrario, pues hasta metieron una marcha más y consiguieron continuar aumentar la ventaja ante un combinado local que no podía sino ir a remolque ante el potencial ofensivo de un combinado zamorano que ha vuelto inspirado del periodo navideño. Finalmente, los de Félix Mojón sacan dos nuevos puntos con un marcador final de 23-39 y que deja al Balonmano Zamora con el mejor sabor de boca en esta primera jornada del año.
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