Desde el primer momento, el Amigos del Duero trató de llevar la iniciativa en el duelo. Las jugadoras de Samuel Merino manejaron el balón más tiempo en el campo rival y buscaron crear problemas al Erizana, aunque es justo resaltar que lo hicieron con escasa profundidad y sin contar con ocasiones claras para adelantarse en el marcador.
Tampoco pudieron hacerlo tras el descanso y las gallegas, más experimentadas, supieron ganar el partido cuando este ya prácticamente había terminado. Las mujeres de Samuel Merino se quedan, de este modo, con un punto después de la disputa de las tres primeras jornadas.