Alberto Miranda es un portero hecho a sí mismo. Este arandino, que fue uno de los símbolos y capitán durante 8 temporadas del Villa de Aranda, llegó a Zamora en agosto de 2012. Sin ningún género de dudas, Miranda ha sido uno de los principales baluartes del salto de calidad experimentado por el MMT Seguros. En su primera temporada en Primera Nacional, su rendimiento fue determinante para alcanzar la fase de ascenso y, una vez allí, firmó tres partidos para enmarcar. La pasada campaña, ya en División de Honor Plata, cuajó actuaciones memorables, como la de Sant Joan Despí ante el Barça B, donde una parada suya desde los 7 metros proporcionó una sonada victoria zamorana. O su partido para enmarcar en La Albericia, ante el Sinfín, que certificó el ascenso a Asobal del MMT Seguros.
Alberto Miranda tal vez no sea el portero más espectacular. Ni el más vistoso. Pero lo cierto es que sus números le avalan. Siempre bien colocado en la portería y estudioso de los rivales, sus paradas en el Manuel Camba han encandilado a una afición que disfruta con sus espectaculares aperturas de contragolpe. Sus pases inverosímiles siempre encuentran destinatario, lo que ha dado al MMT Seguros un arma letal que le ha llevado hasta la élite.
El pasado mes de agosto, en un partido de pretemporada frente a Ademar León, una inoportuna lesión en su rodilla le apartaba durante cuatro meses de la portería. Su baja fue cubierta entonces por el joven Luis Posado que, con 17 años, escuchaba cada sábado los consejos de su maestro. Su regreso, apenas dos minutos en la victoria ante Antequera a finales de noviembre, fue celebrado por la afición casi tanto como los dos puntos. “Volver a la pista después de 4 meses y recibir una ovación que no termina nunca es algo que no se olvida”, recuerda Alberto quien, preguntado por su mejor momento en Zamora, no duda ni un segundo: “Los dos ascensos. El primero por deseado y el segundo por inesperado”.
De cara a la próxima temporada, Miranda cree que “será un año para disfrutar: plantilla, cuerpo técnico, afición… incluso para la ciudad de Zamora será bonito tener un equipo en la élite”, aunque también es consciente de que “será difícil sumar puntos y cuando no se gana se sufre mucho más”. Finalizaba rotundo: “Que nadie dude que este equipo se va a dejar el alma cada minuto sobre la pista, como siempre”.
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