Comenzó a cantar a los diez años y a los doce ya ganó su primer premio. La voz de Marta Rosa se coló entre las piedras del antiguo convento gótico de San Francisco en una velada marcada por su sensibilidad. Los asistentes, volvieron a demostrar el amor hacia los fados en la última jornada del Festival que cerraba su 17ª edición de hermanamiento con la cultura portuguesa a orillas del Duero.
Esta edición ha estado marcada por la mujer, Isabelinha, Helena Sarmento y Marta Rosa han puesto la voz cantante a este, ya tradicional, escaparate de artistas del país vecino.