Se acabó la espera y Zamora vivía anoche uno de los momentos más esperados después de cuatro años sin poder celebrarse. Después de la pandemia vino la lluvia y por fin anoche la Plaza Mayor de Zamora, con cientos de personas agolpadas a su alrededor, volvía a enmudecer ante uno de los actos más sobrecogedores de la Semana Santa de Zamora.
‘La Muerte no es el final’ resonaba en el silencio de la noche mientras que en el centro, el Cristo de la Tercera Caída, arropado por un lado de ‘La Despedida’ y por el otro de la Virgen de la Amargura, junto con la cruz de yugos y la corona de espinas, se balanceaban lentamente al son de este cántico.
Sentimientos a flor de piel ante una escena con un cuidado estético impresionante, que no deja a nadie indiferente y que, por fin, pudo revivirse.
La periodista Ana Pedrero lo plasmaba así en el siguiente vídeo:
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