Nueve meses de trabajo le ha supuesto a José Ramón Sánchez esta novela gráfica, resuelta en 176 páginas y 642 viñetas en blanco y negro en las que se aprecia la mano del artista y el diseño del cinéfilo. La mano ciñó el humilde lapicero y trabajó, incansable, para hacer realidad el sueño que tenía el artista desde la infancia: ilustrar un cómic.
El libro está prologado por el cineasta Daniel Sánchez Arévalo, hijo del dibujante quien dedica a su padre las siguientes palabras: “mi padre está lleno de demonios. Todo creador los tiene. Esto no quiere decir que para crear haya que ser un atormentado o pasarlo mal. Al revés, hay que divertirse con los demonios. Abrazarlos, cuidarlos y llevarlos contigo, porque no te vas a poder deshacer de ellos. Entonces ya no sé si pintar es la manera que tiene mi padre de espantar a los demonios o de acercarse a ellos”.
El acto contó con la presencia del editor de Valnera, Jesús Herrán Ceballos, y José Luis Córdoba, editor de la multinacional Panini.