El público zamorano se nutría este sábado del talento de los alumnos de la Escuela de Música y Artes Escénicas de Arribes. Los pequeños se convertían en el Auditorio Fundos en actores polifacéticos, representando diferentes personajes y divirtiendo al público con su visión de las culturas de otros países.
‘De Arribes al mundo’ era el nombre de la función. La música en solitario, actuaciones musicales y representaciones teatrales se fundían para que el espectador zamorano no perdiera detalle del musical, que pretende ayudar al alumno en su proceso de enseñanza. De esta manera, intentan cumplir su lema: “aprender a aprender”.
En un primer momento, los jóvenes actores ofrecían una visión cómica de la situación en la sala de espera de un hospital, con constantes desbarajustes al más puro estilo ‘Mr Bean’, que aparecía de fondo mientras los chicos provocaban las risas de los asistentes.
Más tarde, el tono cambiaba en la actuación musical de uno de los actores, que se sentabafrente al piano de cola para hacer las delicias del público. Unos espectadores que,atentos a las melodías de su teclado, no podían evitar sacar sus teléfonos móviles para grabar la interpretación de las piezas.
El uso de estos aparatos era tratado más tarde por los pequeños intérpretes, que pedían cómicamente al público guardar sus móviles “si no era para sacarles fotos o vídeos”.
Los chicos se vestían como tulipanes para representar la cultura holandesa, o enseñaban a los asistentes cómo hacer la RCP en el caso de una emergencia. El espectáculo compilaba la diversión, la educación y el talento a partes iguales.