El cierre de la fortificación se produjo el pasado lunes con el fin de acometer la reposición de los tableros de madera del puente situado sobre el foso que da acceso a la entrada y que han sido renovados en su totalidad debido al mal estado en el que se encontraban.
Una actuación que debería haberse llevado a cabo dentro del conjunto de las obras de rehabilitación y recuperación de las estructuras defensivas del Castillo, realizadas con fondos europeos en los mandatos municipales anteriores, por lo que es necesario realizarla ahora debido al grave estado de deterioro del pasadizo.
Concluidos los trabajos de reposición de los que en otros tiempo fuera puente levadizo y para lo que se ha utilizado una madera de origen tropical de gran dureza y durabilidad, debido a su ubicación exterior a la intemperie, el castillo vuelve a abrir sus puertas en el horario habitual de esta época, que es de 10 a 14 horas por las mañanas y de 16 a 18,30 horas por las tardes, con entrada gratuita.