Sinfonía Inacabada es una obra con 22 personajes que, junto con dos apuntadores y cuatro alumnas colaboradoras, permite que 28 alumnos de Bachillerato participen en la obra. Es la cuarta obra de Casona que Rocinante pone en escena porque el grupo disfruta las historias del dramaturgo y porque les da la posibilidad de contar con muchos alumnos.
El alumnado ha respondido en masa, por lo que algunos estudiantes de 2°de Bachillerato han tenido que quedarse fuera por haber participado ya el año pasado y por no encontrar una obra para dar cabida a más de 25 personajes.
La obra se estrenó en 1941 y casi 80 años después Rocinante considera que no ha perdido su interés. Está ambientada a principios del siglo XIX, lo que ha supuesto un esfuerzo extra en el vestuario, que ha contado con la colaboración de madres y abuelas de alumnos. El AMPA ha puesto de su parte económicamente para costear parte de todo lo que necesita la ejecución de la obra.
Es una ficción en la que Casona imagina qué pudo ocurrir realmente para que Schubert no terminase su Sinfonía en Si menor, conocida como ‘Sinfonía Inacabada’.
Los ensayos se han llevado a cabo durante cuatro meses, dedicando unas cinco horas a la semana. La obra se decidió en diciembre y en febrero cogió una percha de actualidad, porque un móvil fue capaz de terminar la ‘Sinfonía Inacabada’.
Rocinante apuesta por un drama para cambiar de registro respecto a la comedia de Jardiel Poncela del año pasado. "Estamos muy satisfechos con el trabajo, la responsabilidad y la puntualidad mostrada por todos los alumnos cada día", aseguran desde la organización del evento.
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