Ni el bombardino ni el cuarteto de viento de la Hermandad Penitencial del Santísimo Cristo del Amparo, conocida coloquialmente como ‘Las Capas Pardas’, romperán el silencio de esta noche de Miércoles Santo por segundo año consecutivo.
Tampoco se podrá oír el Miserere Popular Alistano ni los hermanos de la Hermandad protagonizarán una estampa única de austeridad en un ambiente puramente rural bajo la oscuridad de la noche en el casco histórico zamorano.
Las personas no se agolparán en las calles ni resonarán las matracas ya de madrugada y el espíritu de intimidad y sobriedad que crea el desfile procesional no podrá vivirse un año más.
No obstante, la Hermandad Penitencial de las Capas Pardas realizará un Vía Crucis en el interior de la iglesia a las 21.00 horas en un acto a puerta cerrada con la asistencia de 24 hermanos bajo invitación.
Hoy solo queda recordar algunos momentos de esta procesión única: