Dos grandes rastros se han desarrollado en Zamora durante las Ferias y Fiestas de San Pedro, que han tenido además ubicaciones novedosas y distintas a la habitual de la plaza de Viriato, ocupada en estas fechas por la Feria de la Cerámica. El pasado domingo se celebraba este evento en la entrada del Bosque de Valorio, y este 1 de julio el emplazamiento ha sido la plaza de San Martín.
Se trata de un aliciente más para salir a la calle durante estas fiestas de San Pedro, y una nueva oportunidad para fomentar una actividad muy arraigada en otras ciudades y que en Zamora supone una oportunidad para que los vecinos den salida a aquellas cosas que ya no necesitan y que pueden ser de utilidad para otras personas, dando una segunda vida a los objetos que tenemos en casa, sin uso para nosotros y ocupando un espacio innecesario.
Cientos de zamoranos han pasado por este rastro-trueque en la Plaza de San Martín durante la jornada, pese al riesgo de lluvia. Además, la ubicación encima del parking subterráneo ha permitido que muchos visitantes también se encontraran con él después de dejar el coche en el aparcamiento. Todo en una agradable mañana de domingo donde se ha visto a los ciudadanos muy animados en sus compras.
El rastro-trueque es una iniciativa ciudadana que se inició hace unos años en el barrio de Olivares y que, poco a poco, ha ido incrementando su actividad con la presencia de nuevos vecinos, evitando también con ello que muchos objetos acaben indebidamente en los cubos de basura o en vertederos incontrolados, pudiendo ser de utilidad para otras personas.
Animada jornada en el rastro-trueque de San Martín
Este domingo, varios puestos se ubicaban en el parque de San Martín para tomar parte de un rastro-trueque que tuvo su precedente hace una semana en el bosque de Valorio.
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