“El Sistema Nacional de Salud, que próximamente va a cumplir 40 años, nos ha proporcionado una asistencia sanitaria de calidad en toda España, y también unos indicadores sanitarios envidiables para otros países”. Pero “todos tenemos claro” que hay una serie de problemas que se ciernen sobre el sistema sanitario, que la pandemia “ha puesto en el candelero” y, “o se resuelven, o va a sufrir mucho”. La financiación y la situación de los profesionales son los dos retos más importantes que marca el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, en ‘Los desayunos de Ical’, donde incide en que ha llegado más que el momento de abordarlos, por lo que conllevan, desde la incorporación de nueva tecnología; innovación farmacéutica; la innovación también de la tecnología diagnóstica, salud digital y cronicidad. “Ha llegado el momento en que hay que resolverlo”.
El sistema de financiación autonómica, que a su juicio “no cumple el fin para el cual está diseñado”, exige un nuevo modelo que garantice la suficiencia de la sanidad, porque Castilla y León tiene dos condicionantes demográficos “muy importantes”, el envejecimiento y la dispersión geográfica, que elevan, y “mucho” el gasto sanitario, mientras que el modelo actual pondera a partir de la población ajustada. “Es obligado darle una vuelta y cambiar este sistema de financiación autonómica si queremos que la sanidad de Castilla y León y de otras comunidades también tenga la suficiencia financiera necesaria para poder ejercer sus fines”.
Pone un ejemplo. En los mayores de 65 años esa población ajustada pondera un ocho por ciento, mientras que los menores de 18, pondera un 30. “Evidentemente, está claro que el gasto sanitario de una persona lo hace fundamentalmente a partir de los 65 años. Esto nos perjudica, como nos perjudica la dispersión, que nos obliga a tener una estructura mucho más amplia de lo que nos correspondería simplemente por población y que pondera con un 0,6 por ciento”.
Por lo que respecta a los profesionales, con un déficit en algunas especialidades, Vázquez insiste en que es necesario “atajarlo y hacerlo a nivel nacional”, porque con independencia de la capacidad limitada de las comunidades autónomas, los problemas de personal son “vasos comunicantes”, es decir, “ lo que crece en un lado decrece en otro”.
En este sentido, reitera, la necesidad de llevarlo al pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, petición que ha exigido una y otra vez en los últimos dos años, de la mano de otras autonomías, y no sólo por el número, “que es muy importante”, sino también sobre su situación, es decir, necesidades de conciliación, guardias y desarrollo profesional. “El Ministerio tiene que ejercer la labor de coordinación y el personal es quien vertebra todo el sistema nacional de salud”.
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