González, que participó en las labores de extinción del incendio en Gran Canaria, fue sancionado con dos días de empleo y sueldo por conceder una entrevista en su tiempo de descanso a un digital de la capital leonesa.
Este martes, en las puertas de la Delegación del Ministerio de Trabajo en León se han congregado compañeros de Pablo González para seguir el acto de conciliación previo al juicio con Tragsa y que finalmente no se producirá.
Pablo González salió a la calle con una sonrisa y entre abrazos dio la noticia a compañeros y familiares tras unos momentos que él mismo ha calificado de "muy difíciles". El brigadista y presidente de la Asociación de Trabajadores de la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (ATBRIF) ha reclamado que es tiempo "de diálogo y sentarse a hablar".
González ha defendido que solo buscan "visibilizar su trabajo" y, al mismo tiempo, que la sociedad valore "el duro trabajo" realizado por los bomberos forestales, a los que ha agradecido "el apoyo internacional" recibido. Asimismo, ha indicado que Tragsa "no se ha disculpado" y ha manifestado que confía en que "no se tape su trabajo" y que en ningún momento va a "hacer algo mal" por un dispositivo de incendios.
TRAGSA DEFIENDE SU POSTURA
Por su parte, fuentes de Tragsa han señalado que la decisión de la sanción se tomó tras la entrada en vigor del nuevo convenio en julio que han firmado "UGT, CCOO y CSIF tras años de negociación". Todo ello a sabiendas de que su conducta "es sancionable" y que por su antigüedad en la empresa ha sido "prácticamente mínima", ya que va de uno a quince días. Desde Tragsa han reconocido que "antes sí podían hacer declaraciones", pero con el cambio de este nuevo tipo sancionador "pilla desprevenido" a Pablo González, el BRIF sancionado.
Asimismo, el 24 de septiembre Pablo González se puso en contacto con la empresa a través de una carta para incidir en que "no ha tenido mala fe" y que es respondida por el presidente ese mismo día que "comparte el mismo objetivo". Sobre un diálogo futuro posible en torno a estos artículos sancionadores, se han mostrado "sorprendidos" ya que el nuevo convenio ha tenido el visto bueno "de los sindicatos" en virtud de la legislación actual.
Por último, desde Tragsa han reconocido que "no hay ningún motivo para no mantener la normalidad" con Pablo González y los compañeros que han apoyado al brigadista durante todo este proceso.