Agentes de la Policía Nacional han detenido en la madrugada de hoy a dos jóvenes, de 21 y 25 años, como presuntos autores de un delito de lesiones, tras agredir a la víctima a puñetazos y patadas hasta dejarla inconsciente, en una discoteca de la zona de ocio de la Plaza de la Reina. Los dos jóvenes habían sido identificados previamente por el hurto de un teléfono móvil.
Los agentes acudieron sobre las 04:45 horas de hoy a una discoteca de la Plaza de la Reina donde, según comunicación telefónica recibida, se había producido el hurto de un teléfono móvil a una de las clientas del local, estando los dos presuntos autores localizados. A su llegada, algunos testigos les manifestaron que al verse descubiertos, habían devuelto el terminal a su propietaria y habían salido del establecimiento en dirección a la calle Gonzala Santana, donde fueron alcanzados e identificados.
Sobre las 05:15 horas, de nuevo se requirió presencia policial en la discoteca, en esta ocasión porque un joven había sido golpeado y permanecía inconsciente en el suelo. Los agentes observaron al joven, comprobando como estaba inconsciente y observando como se recuperaba a intervalos, pero volviendo a perder de nuevo la consciencia, por lo que solicitaron asistencia médica en el lugar, efectuándose posteriormente el traslado al Complejo Hospitalario para tratamiento y diagnóstico del herido, con pronóstico reservado.
Por manifestaciones y averiguaciones practicadas entre los testigos, conocieron que los agresores eran los mismos jóvenes previamente identificados por el hurto del teléfono, que al parecer regresaron a la discoteca y golpearon al herido de forma sorpresiva con un puñetazo, agrediéndole posteriormente en el suelo a patadas en cuerpo y cabeza, huyendo del lugar, aunque la rapidez de la intervención propició su persecución y detención inmediata.
Los dos jóvenes reconocieron la autoría de los hechos, justificándose en que la víctima les había llamado ladrones por el hurto previo del teléfono, por lo que habían regresado al establecimiento y le habían agredido.