Un centenar de personas, entre ellas, personal técnico y empresas turísticas, están invitadas a participar mañana martes, 7 de julio de 2020, por videoconferencia, en una jornada informativa titulada ‘Iniciativas para el sector turístico, ayudas y sellos de confianza’, organizada por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, en colaboración con la Fundación del Patrimonio Natural.
El principal objetivo de esta actividad, prevista por la mañana, es apoyar a los empresarios turísticos cuyas actividades se desarrollan en el territorio, así como promover el desarrollo del turismo sostenible en los espacios naturales protegidos acreditados, un esfuerzo adicional para hacer llegar al visitante la importancia de un comportamiento ambiental adecuado y el disfrute de una experiencia de calidad en un entorno privilegiado.
La inauguración del acto la hará el jefe del Servicio de Espacios Naturales, Flora y Fauna de la Consejería. Los ponentes serán, por un lado, un representante de la Secretaría de Estado de Turismo del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo y, por otro, un representante de la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, quienes se encargarán de informar a los empresarios turísticos de los nuevos retos y líneas de subvenciones que se han puesto en marcha desde sus respectivos ámbitos de trabajo y que, sin duda, resultarán beneficiosos para el sector turístico en estas zonas rurales tan desfavorecidas. La clausura de la jornada correrá a cargo del director general de Patrimonio Natural y Política Forestal de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, José Ángel Arranz.
Castilla y León, comprometida con el turismo sostenible en los espacios naturales protegidos
La Carta Europea de Turismo Sostenible es un reconocimiento que otorga la Federación Europarc. Se basa en un compromiso y acuerdo voluntario entre los actores implicados en el desarrollo turístico en el espacio natural protegido (ENP) para llevar a la práctica una estrategia local a favor del turismo sostenible. La Carta CETS ha sido inscrita en las prioridades mundiales y europeas expresadas por las recomendaciones de la Agenda 21, adoptadas en la Cumbre de la Tierra en Río en 1992.
Castilla y León inició el proceso de adhesión a la CETS en el año 2007 con el Parque natural Las Batuecas-Sierra de Francia (Salamanca), al que le siguieron las acreditaciones de la Reserva natural Valle de Iruelas (Ávila), del Parque regional Sierra de Gredos (Ávila), del Parque natural Hoces del Río Riaza (Segovia), y el último destino en sumarse a la carta, por el momento, en el año 2015, ha sido el Parque Natural Fuentes Carrionas y Fuente Cobre-Montaña Palentina (Palencia).
El interés de esta acreditación radica en el sistema de trabajo; en todas las cartas se constituye un grupo de trabajo multidisciplinar, representativo y operativo, que elabora el dossier de candidatura de forma participada. Los documentos elaborados en el seno del grupo de trabajo se validan a través del foro permanente, ente de participación en el que existe una representación de todos los agentes locales y regionales implicados en el desarrollo turístico del territorio y en la conservación de los recursos naturales y culturales de cada espacio natural protegido. El dossier de candidatura se presenta a la Federación Europarc, que evalúa la documentación remitida. Posteriormente, un auditor de Europarc verifica la veracidad del diagnóstico, el compromiso de los actores y la viabilidad de la estrategia y el plan de acción mediante un amplio programa de visitas, reuniones y entrevistas con los diversos agentes locales y regionales implicados.
Durante los cinco años siguientes a la adhesión, el espacio protegido y los demás agentes implicados tendrán que ejecutar el plan de acción y realizar un seguimiento del mismo. Transcurrido este período deberá presentar la candidatura para la renovación, en un proceso similar al anterior, demostrando la adecuada aplicación de la Estrategia y el Plan de Acción, y elaborando un nuevo compromiso para los próximos cinco años.
En definitiva, la CETS está diseñada para favorecer la aplicación de los principios del turismo sostenible, lo que se consigue a través un programa de acciones que se planifica para períodos de cinco años, y que debe ser aprobado y renovado por Europarc para que el territorio pueda acreditarse como destino de excelencia en turismo sostenible.
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