La formación y la Prevención en Riesgos Laborales son los pilares sobre los que ha de asentarse el sector de la construcción para recuperar niveles parecidos a los anteriores a la crisis económica de los últimos años de la primera década del siglo XXI.
Por ello, la Fundación Laboral de la Construcción en Castilla y León, con la ayuda de los sindicatos, lleva desde 2000 detectando riesgos en la comunidad autónoma para intentar reducirlos. Durante esta tarea ha contado 140.000 casos.
“Algunos de ellos son fácilmente subsanables: no llevar el cinturón, no colocarse un arnés, circular por los andamios indebidamente… Tenemos que seguir trabajando en Prevención de Riesgos Laborales para dotar al sector de especialistas y empresas con solvencia, pero el problema lo encontramos en que tendría que acudir más gente a los cursos de formación”, indica Javier Vega, presidente de la Fundación Laboral de la Construcción en Castilla y León.
En la misma idea se muestra el consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo, que este lunes ha clausurado en Salamanca el ‘Programa 2018 de Apoyo en Prevención a Empresas del Sector de la Construcción’, creado por la Fundación Laboral de la Construcción en Castilla y León: “Es el sector que más empleo perdió por la crisis. Ahora está afrontando una etapa de crecimiento, aunque seguramente no volverá a ser lo que era en 2006, 2007 o 2008. Aun así, tenemos que seguir formando a los trabajadores porque algunos de los que se fueron al paro en aquel momento ya están jubilados y otros se encuentran desempeñando oficios ajenos a la construcción. Las empresas requieren profesionales cada vez más preparados y hay que impulsar la Prevención en Riesgos Laborales porque este sector productivo es el que presenta mayor riesgo por sus propias características”.