El Colegio de Ópticos Optometristas de Castilla y León (COOCYL) dedicará a la investigación la primera campaña de su nuevo plan de salud visual, que, bajo el lema '12 meses, 12 cuidados visuales', quiere acercar a la población cada mes las principales medidas de prevención y detección ante alteraciones visuales especialmente sensibles en la población, como el glaucoma, la Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE) o la creciente miopía entre los jóvenes por el mal uso de las nuevas tecnologías.
Así, coincidiendo con el Día Mundial de la Visión y la Optometría, que se celebra el segundo jueves de octubre –este año, el próximo día 11–, el COOCYL ha celebrado una presentación conjunta con el Grado de Óptica y Optometría (GOyO) de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Valladolid (UVa) para poner en valor la importancia de la investigación como garantía de futuro para estos profesionales sanitarios de atención primaria en salud visual.
Nuevo algoritmo para la adaptación de lentillas
La comparecencia, en la que han intervenido Raúl Martín Herranz, coordinador del GOyO; el director del Instituto Universitario de Oftalmología Aplicada (IOBA), el doctor Miguel Maldonado, y la secretaria general del COOCYL, Ana Belén Cisneros, ha estado presidida por el decano de la Facultad de Ciencias de la UVa, Isaías García de la Fuente, quien ha resaltado la excelencia de los estudios de Óptica y Optometría, “uno de los Grados más jóvenes de la institución académica –comenzó a impartirse en 1996– y de los más demandados”.
Durante el acto se ha presentado un proyecto de investigación basado en un nuevo algoritmo para simplificar el proceso de adaptación de lentes de contacto especiales en pacientes con queratocono, avance que ha sido transferido a la empresa Conóptica.
Este dispositivo, defendido por la óptico-optometrista Sara Ortiz Toquero en su tesis doctoral y que el pasado año obtuvo el Premio Extraordinario de Doctorado de la Universidad de Valladolid, supone una mejora sin precedentes para los afectados por esta patología degenerativa de la córnea, caracterizada por una alteración en su forma, que se hace irregular, lo que causa serias dificultades para lograr una adecuada corrección visual.
Con el algoritmo de esta experta, la adaptación de lentes de contacto es más sencilla, más rápida y mucho más eficaz para los pacientes. Un ejemplo excelente de la consolidación de los estudios de Grado de Óptica y Optometría de la Universidad de Valladolid en pos de una mejora en la atención visual de los ciudadanos.
En este sentido, el coordinador del Goyo y la secretaria general del COOCYL han querido poner en valor el papel indiscutible de estos profesionales sanitarios formados de forma permanente que desarrollan actividades dirigidas a la prevención, detección, evaluación y tratamiento de alteraciones de la función visual. En el mismo sentido se ha pronunciado el director del IOBA, quien ha destacado que la colaboración que existe entre los profesionales de la Oftalmología y la Óptometría en el seno de la UVa es “modélica” en España. “Desarrollamos un trabajo codo con codo tanto en el ámbito de la docencia como en el de la investigación y la asistencia, donde los ópticos-optometristas desempeñan un papel tremendamente relevante, siempre con el objetivo de aunar conocimientos para lograr avances de los que se pueda beneficiar toda la población”, ha señalado el doctor Maldonado.
Comprometidos con la sociedad
"Los optometristas nos encontramos comprometidos tanto con nuestra profesión como con la sociedad. Es por ello que no solamente nos hemos formado con sólidas bases del conocimiento científico, técnico y clínico de la Óptica y la Optometría, sino que estamos comprometidos con la actualización periódica de los conocimientos teórico-prácticos adquiridos mediante un aprendizaje continuado y permanente, siempre con la capacidad y la ilusión de seguir aprendiendo para mejorar la atención a nuestros pacientes", ha señalado Ana Belén Cisneros.
‘12 meses, 12 cuidados visuales’
Este compromiso es, precisamente, la base del nuevo plan de salud visual del COOCYL, que cada mes lanzará una campaña informativa dirigida de forma específica a aportar pautas de conducta, señales para avanzar en el diagnóstico precoz y opciones de ayudas en el caso, por ejemplo, de las personas con discapacidad visual, cuyo Día Internacional se celebra el 3 de diciembre.
Así, desde este mes de octubre, coincidiendo con el Día Mundial de la Visión y la Optometría, hasta septiembre de 2019, el Colegio difundirá a través de los medios de comunicación y de sus redes sociales consejos de prevención y cuidado visual para la población de la Comunidad castellano y leonesa.
También con este objetivo, el de contribuir al bienestar de los ciudadanos, se ha consolidado el Grado de Óptica y Optometría, "único en Castilla y León y muy singular en comparación con el resto de Universidades nacionales que imparten esta titulación, puesto que Valladolid apuesta por la excelencia en la formación de los profesionales sanitarios dedicados al cuidado de la visión en tres grandes ejes: la formación de Grado, la formación de Postgrado y la realización de tesis doctorales", según ha destacado de Raúl Martín Herranz.
Así, estos estudios que próximamente cumplirán 25 años desde su instauración, han propiciado "una labor docente e investigadora que se traduce en la realización de trabajos fin de grado, fin de máster y tesis doctorales que han obtenido premios de innovación a nivel docente, como los galardones del Consejo Social de la Universidad de Valladolid; en el campo de la innovación en I+D, como el Premio Prometeo, o la convocatoria LANZADERA", añade el coordinador del Grado. Destaca, además, algunos trabajos del Programa de Doctorado en Ciencias de la Visión coordinado por el IOBA, entre ellos, la tesis doctoral de Irene Sánchez Pavón, que fue la primera en ser dirigida por un doctor optometrista en la Universidad de Valladolid. Realizada en colaboración con el CNM-CSIC y la Universidad Autónoma de Barcelona, analizó las posibilidades de incorporar un nuevo sensor en una lente de contacto para monitorizar la presión del globo ocular.
En colaboración con el CNM-CSIC, también realizó la tesis Ana del Río Sacristán, codirigida por el actual director del IOBA, que exploró la aplicación de nuevas tecnologías basadas en el análisis de la bioimpedancia corneal a la exploración de la salud e integridad de la córnea.
En definitiva, un intenso trabajo científico para la transferencia de conocimiento en el que el COOCYL pone el foco para destacar que los ópticos-optometristas "poseemos la formación adecuada para realizar exámenes optométricos completos, así como para desarrollar un examen diferencial de calidad, con el fin de detectar posibles anomalías visuales, buscando siempre la prevención de los problemas oculares, el tratamiento de los mismos con los mejores medios a nuestro alcance y el trabajo conjunto con los distintos profesionales sanitarios para lograr el mejor desarrollo visual y funcional del paciente", añade Ana Belén Cisneros.
En este contexto, "el Colegio se encarga del buen funcionamiento de la profesión, velando para que se ejerza con las máximas garantías para el usuario, ocupándose igualmente de la formación continuada para lograr una visión más saludable en la población", concluye la secretaria general.