Los trabajadores del transporte de viajeros han decidido reanudar la huelga suspendida en solidaridad con las víctimas de la reciente Dana, tras la mejora progresiva de las condiciones de movilidad en las zonas afectadas. La nueva convocatoria de paros comenzará el próximo 28 y 29 de noviembre, y continuará los días 5, 9 y 23 de diciembre, momento en el que la huelga se convertirá en indefinida.
La principal reivindicación de los trabajadores es la aplicación de coeficientes reductores para permitir la jubilación anticipada de los conductores profesionales, una medida que consideran esencial debido a la penosidad y peligrosidad de su trabajo. Desde el sector laboral, insisten en que esta medida es vital para proteger la salud y seguridad de los trabajadores del transporte.
A pesar del apoyo a esta causa, la huelga excluye a las zonas afectadas por la Dana y a los servicios de transporte cuya salida o destino esté en estas áreas, para no interrumpir la movilidad de las personas afectadas por la catástrofe.
Por su parte, la patronal del transporte se ha mantenido firme en su negativa a implementar esta medida, alegando que no pueden asumir los costes asociados a la jubilación anticipada. Sin embargo, no han querido entrar en el debate sobre los beneficios que, según los trabajadores, esta medida podría tener en términos de seguridad, ahorro y bienestar. Desde UGT, aseguran que siguen abiertos al diálogo y a la negociación para llegar a un acuerdo que beneficie tanto a los empleados como a las empresas del sector.
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