El portavoz en funciones de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, ha asegurado que el Ejecutivo vive con "preocupación" el incremento de la cifra de pobreza reflejado en le informe de Cáritas y, pese a defender las medidas impulsadas en la Comunidad, ve necesario abordar esta nueva realidad.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, Fernández Carriedo ha insistido en el dato de que la pobreza ha aumentado tanto en Castilla y León como en el conjunto del país como consecuencia de la pandemia. "Hay una realidad cierta que hay que abordar", ha defendido, al tiempo que ha señalado que "no es consuelo" que los datos de la Comunidad sean más bajos que en la media del país.
"La pobreza existe, afecta a muchas personas y ha crecido en los últimos tiempos", ha asegurado, tras lo que ha recordado que desde la Junta se repartieron ocho millones de euros entre las corporaciones locales para impulsar medidas de protección para personas con dificultades, se destinaron ayudas de 130 euros para familias desfavorecidas y se reforzó el ingreso mínimo vital para alcanzar las cifras de la renta garantizada.
Por último, ha insistido en que los ciudadanos de la Comunidad cuentan con el apoyo de los servicios sociales, desde donde se ha reforzado la colaboración con el tercer sector, aunque ha defendido que la mejor manera de atajar la pobreza es generar puestos de trabajo.